Contingente. Unos 300 gauchos participaron de la cabalgata a la Difunta Teresa, en Angaco, organizada por la agrupación gaucha angaquera que lleva su nombre.

A Mario Sánchez se le humedecieron los ojos. Fue cuando habló sobre el motivo por el que iba a cabalgar 63 kilómetros. Dijo que haría la travesía para dar gracias de tener 50 años y trabajo. Fue uno de los 300 gauchos que ayer, en Angaco, iniciaron la cabalgata en honor a la Difunta Teresa y que este año le pedirán a la ’milagrosa’ una bendición para mantener su fuente laboral. Las actividades continuarán hoy en el predio del paraje Agua del Conejo, cerca del límite con Jáchal y Valle Fértil.

La cabalgata arrancó lentamente y antes de poner en marcha su caballo, Miguel Gramajo se persignó. Fue para poder completar el trayecto y llegar hasta la tumba de la Difunta para cumplirle una promesa. ’Le prometí que si conseguía trabajo iba a hacer la cabalgata todos los años. Ella me cumplió el pedido por eso yo estoy cumpliendo con mi promesa’, dijo el hombre. 

Agradecer el haber conseguido trabajo o pedir mantenerlo, no fue el único motivo por el cual los gauchos emprendieron la travesía. También lo hicieron para pedirle a la Difunta por la salud de sus familias.

Varios gauchos participaron solos de la cabalgata, pero contaron con el apoyo de sus familiares. Padres, esposas e hijos llegaron hasta el Barrio Presidente Perón, desde partió el contingente, para despedirlos y desearles un buen viaje. Ese fue el momento más emotivo del evento, ya que los jinetes también recibieron la bendición de Dios antes de la partida. Fue Néstor Molina, párroco de Angaco, quien se encargó de encomendarlos al Señor y de pedirle a la Virgen que les diera protección para culminar sanos y salvos esta manifestación de fe.

Cerca de las 14, el gauchaje llegó hasta los Baños de Guayaupa para descansar y compartir el almuerzo. Allí permaneció sólo por una hora, ya que retomó la marcha para llegar hasta el paraje de la Difunta Teresa antes del anochecer.
Una vez que arribaron al lugar fueron inmediatamente a visitar el oratorio de la Difunta para cumplir con sus promesas y dejarle velas a modo de ofrendas. 

Al anochecer los gauchos se congregaron en el centro del predio para entonar el Himno Nacional y compartir el fogón criollo que contó con la actuación de algunos artistas.

Las actividades continuarán hoy con espectáculos de destreza criolla y algunos juegos para los más chicos con motivo de la celebración del Día del Niño.

Reconocimiento

La Cámara de Diputados declaró de Interés Cultural, Social y Turístico, a la Cabalgata a la Difunta Teresa. Además, la agrupación organizadora de la travesía y que lleva su nombre recibió de regalo una Bandera Argentina para izar en el paraje donde está el oratorio en honor a la Difunta. El obsequio lo hizo Roberto Pessé, diputando provincial.