Son enormes, entre los cuatro logran un promedio cercano al 1,90 mts. Pese a ello no son rústicos, son inteligentes, se acoplan a la perfección, son impasables y ayer fueron claves para el triunfo. Son Gastón Stang, Leonardo Sánchez, Líder Mármol e Ignacio González. Lo de ayer era la prueba para la última línea defensiva. La propuesta de Hrabina, de esperar y marcar, tenía en ese cuarteto al condimento especial. Y los cuatro respondieron. Los centrales fueron un relojito. Sánchez y Mármol jugaron como si se conocieran de varias temporadas, cuando recién es su segundo partido juntos. Leo salió al cortar, y el paraguayo esperaba unos metros más atrás para frenar todo. Impecables. Sin fisuras y vitales. Sobre los laterales, a Stang que debutó, fue a quien más le costó porque por su sector era donde hería Belgrano y por ende antes de quedar mal parado, cortaba el juego. Mientras que Nacho le puso proyección, fue firme en la marca y salió en defensa de todos. Son las nuevas torres, las que te ganan partidos como los de ayer.
