En esta zona. Desde la Policía dijeron que el boliche clausurado está ubicado en Libertador, entre Ameghino y Urquiza, en Capital. 

Una gran sorpresa se llevó un grupo de efectivos policiales cuando, en un procedimiento de rutina en un boliche encontraron a una niña de 13 años totalmente borracha. Si bien esta situación ocurrió el fin de semana pasado, recién se dio a conocer ayer. El operativo fue realizado por efectivos de Leyes Especiales y de la Comisaría del Menor. Horacio Morando, el juez del Primer Juzgado de Faltas que estaba de turno ese día, dijo que aún no fue notificado oficialmente del caso y que calcula que el viernes tendrá una entrevista con los propietarios del boliche.


Según trascendió ayer, el hecho ocurrió el domingo a las 3,30 de la madrugada en medio de un operativo que se realizó para ver las habilitaciones y la presencia de menores en los boliches. Los efectivos entraron al llamado Ink, ubicado en Libertador, entre Ameghino y Urquiza en Capital y encontraron a una chica borracha. Al entrevistarla notaron se trataba de una menor de edad. Fuentes ligadas al caso dijeron que la jovencita dijo que tenía 14 años, pero después se comprobó que tenía 13. Estaba en el suelo y casi sin poder movilizarse por su propios medios. De inmediato fue trasladada al hospital Rawson e intentó comunicarse con su papá, pero eso no pudo realizarse. Cuando pudo decir dónde vivía los mismos efectivos fueron a buscar al padre y lo trasladaron al hospital donde reconoció que la niña internada era su hija. Al hombre le labraron un acta, al igual que al boliche, que fue clausurado de inmediato. 


‘Aún no tuve acceso al expediente. Lo que sé es porque me lo comentaron desde la Policía, pero seguramente se hará una infracción al papá de la niña, porque hay un artículo de la Ley Seca que así lo establece‘, dijo el magistrado y comentó que es habitual que tengan causas de menores dentro de los boliches, pero que es muy raro que encuentren menores en ese estado de ebriedad.