Estamos en un contexto de una fuerte sequía. Esto no es novedad para nadie ya que desde hace mucho tiempo se esperaba una de las "seca" más fuertes para la historia de San Juan. Esto fue advertido por la Sociedad de Chacareros Temporarios de San Juan hace 7 años gracias al recordado Programa de Asistencia Integral para el Agregado de Valor en Agroalimentos, Procal Cuyo, que les permitió acceder al Plan Nacional de Riego.

Para el ingeniero Alejandro Montoro, agrónomo de la entidad, "en una sequía extrema cómo la actual, "contar con una herramienta financiera para un momento tan difícil es clave. Desde el 2015 se viene trabajando en nuestra institución, con un fondo rotatorio a nivel nacional de $2,3 millones que ha dado ya 7 ciclos de giro, es decir, siete veces se ha prestado y devuelto el dinero". 

Agregando luego: "funciona de manera exitosa, permitiendo que el productor al devolver su dinero lo entregue a un nuevo beneficiario; siendo entonces un instrumento muy noble de financiamiento". Es notable este instrumento en momento en que algunos proyectos de ley provincial, como el presentado por empresarios como Ricardo Martínez en el 2009 y Francisco Paladini el año pasado, promueven el uso de un 10% de las regalías mineras para optimizar el uso del agua en San Juan.

Y en este sentido Montoro afirma: "En función del éxito de este fondo rotatorio nacional, el año pasado la Sociedad de Chacareros recibió un nuevo aporte para crédito rotatorio, en esta oportunidad del Ministerio de la Producción del gobierno de la provincia, de unos $4 millones y que se ha entregado a 9 productores que están generando el primer ciclo; que al devolver podrá entregarse a nuevos socios que mejoren su riego".

MECANISMO

"Para acceder al fondo rotatorio, los productores deben estar asociados a la entidad con un año mínimo de vinculación, al día con las cuotas y manifestar una necesidad o problemática clara respecto del riego", explica el profesional agregando: "La Sociedad la recibe y evalúa en un comité de créditos integrados por miembros de la Sociedad de Chacareros, del INTA y el Ministerio donde se evalúan las solicitudes y se priorizan las más urgentes y necesarias".

Para tomar una dimensión del tamaño o capacidad de los productores, Montoro indica "el tamaño mínimo de los 9 chacareros beneficiados, sumando cerca de 80 hectáreas; con una diversidad de cultivos muy grande, es decir, con unos 20 cultivos o especies diferentes".

Esto habla del conocimiento de los productores, "un pequeño chacarero tiene el manejo de 5, 6 o hasta 10 o más especies vegetales y esto marca la experiencia. Un saber popular que se va transfiriendo desde los abuelos de los actuales chacareros a las nuevas generaciones que hoy se suman al Mercado de Rawson".

CRECIMIENTO

Para el profesional, "la pandemia motivó el regreso de muchas personas al campo, a la finca y una vida más saludable, así como la matriz económica de muchos negocios, haciendo virar de otras actividades económicas muy limitadas a actividades esenciales como la producción de alimentos".

Y destacó que por ello "el destino de los fondos es para asegurar y hacer lo más eficiente posible el riego. Según cada caso se destina a nuevas perforaciones, reparación de pozos viejos, reprofundizaciones, electrobombas nuevas o más potentes, construcción de reservorios y de equipo por goteo".

"El fondo rotatorio ha sido una herramienta muy válida que ha beneficiado a unos 60 productores en 7 años. El primer año benefició a 18 productores y el año solo a 4 por el impacto de la inflación. Los costos de las inversiones son cada vez mayores en pesos", explicó.

"Este fondo, lo que tiene de valioso también, es el aprendizaje de nuestra entidad en el manejo de herramientas financieras. La Sociedad de Chacareros no tenía experiencia en el manejo de fondos rotatorios ni en otorgar créditos. Con este instrumento lo puedo aprender en carne propia", afirmó.

Consultado por la extrapolación a otras entidades marcó: "Sin duda es un instrumento muy válido. Necesita de una institución madura como la Sociedad de Chacareros, con una trayectoria impecable en el manejo de fondo. Estamos hablando de montos muy importantes y de muchas personas interesadas en obtener el crédito".

"Por ende el proceso de evaluación de los aspirantes es muy importante y aún más importante es el compromiso de pago posterior. Es decir, es una herramienta muy válida, al dejar en mano de los productores instrumentos que necesitan y usan los mismos productores", destacó el ingeniero agrónomo.

"Observo un compromiso muy fuerte de parte de los chacareros por devolver los fondos por que saben que un colega está esperando esos mismos recursos. Hasta la presión de pago se ejercer, casi sin querer, entre ellos mismos", afirmó.

ENSEÑANZA

"En este proceso de aprendizaje, entendimos cosas claves, como el manejo de tazas y costos originarios. En un primer momento el Plan Nacional de Riego limitaba el costo a un 15% anual, que mantuvimos por un período al darnos cuenta que el fondo rotatorio estaba desapareciendo. Beneficiando cada vez a menos productores", marca el profesional.

"Cuando aparecen nuevos fondos rotatorios a nivel provincial, se optó por obtener un resultado puro que no se deprecie en el tiempo, el chacarero devuelve el costo del equipo a tasa de interés cero, pero con el valor actualizado a precio del producto a valor de mercado. Es decir, y a modo de ejemplo, que si el fondo pudo financiar 10 electrobombas en un principio, el fondo pueda seguir financiando el mismo número de equipos a perpetuidad", indicó.

"Un total de 69 socios hoy han accedido a los fondos rotatorios de un padrón total de unos 330 asociados cultivando unas 1.200 hectáreas", sentenció finalmente Montoro.