La Lobesia botrana es una polilla cuyas larvas se alimentan de las inflorescencias, vayas verdes y maduras del fruto de la vid. Es una plaga cuarentenaria calificada así por la importancia que le asignan los países que no la tienen y por la cual se realizan rigurosos controles en el comercio agropecuario mundial.

Esta plaga puede ocasionar pérdidas de producción de hasta un 80%. En uvas de mesa para cumplir con los tratamientos cuarentenarios hacen elevar el costo de producción y en uvas para bodegas los hongos asociados a su ataque ocasionan problemas técnicos en la clarificación, malos aromas y sabores en los vinos.

Fue descripta por primera vez en Austria en 1775 y desde allí este insecto se difundió por la zona mediterránea europea, Europa Central y sur de Rusia, norte de África hasta Egipto, Medio Oriente, Israel, borde oriental de África, principalmente Kenia. En Chile fue detectada en el 2008 y en California en el 2009. La aparición en la Argentina se dio en el 2010 en la localidad Cruz de Piedra, Maipú, Mendoza.

Lobesia ingresó al país desde Chile y se mueve de modo tal que parece un reguero de pólvora.

En la vecina provincia sobre una superficie de más de 160.000 hectáreas con viñedos, la polilla de la vid ya ha avanzado sobre 130.000, es decir el 75% causando pérdidas de un 30%.

En San Juan en los últimos años se trabajó con distintas medidas para evitar el ingreso. Lamentablemente trampas esparcidas por varias fincas lograron detectarla a través de algunas capturas aisladas. Esto a hecho que el gobierno provincia y el Senasa extreme más aún los controles.

El Senasa, organismo público encargado de la política fitosanitaria del país, comenzó el trampeo en zonas vitícolas para detectar presencia y dispersión, monitorear el ciclo biológico (número de generaciones), aplicar medidas de manejo en zonas afectadas y evitar su dispersión hacia zonas libres.

Ciclo Biológico

*Huevo:forma lenticular, mide 0.7 x 0.6 mm. Son de aspecto traslúcido, de tonalidades amarillentas. Es posible ver el desarrollo del embrión dentro del mismo. La hembra coloca de 2 a 3 huevos por grano, o en forma aislada.

*Larva: la larva neonata mide aprox. 1 mm de longitud. La cabeza es negra y el cuerpo amarillo claro. Tiene cinco estadios larvales.A partir del segundo estadio presenta la cabeza y el escudo protorácico de color pardo más claro, el cuerpo de colores más variables: amarillo, verde dependiendo de la alimentación. Alcanza a medir entre 10 y 15 mm.Placa protorácica de color café, con borde posterolateral oscuro.Patas verdaderas oscuras.Detección de la larva: sedas.Glomérulo de seda.

*Pupa: para pupar , la larva busca un lugar adecuado donde forma un capullo sedoso fusiforme de color blanquecino, denso y resistente.: el tamaño varia con el sexo: hembra: 5-9 mm; macho: 4-7 mm. La coloración es variable, habiéndose observado desde verde intenso a café muy oscuro.Pupas bajo la corteza.

*Adulto: mide. 10-13 mm de envergadura alar. Las alas anteriores tiene el aspecto de mosaico con manchas oscuras en marrón alternado con zonas claras grises, destacándose una banda en la zona media. Contrastan con el tinte grisáceo más o menos uniformes de las posteriores que están provistas de flecos.

*Dispersión: a través del movimiento de uva, movimiento de maquinaria, cajones o bines utilizados en la cosecha,traslado de material de propagación.

Status fitosanitario

Hoy en el status fitosanitario esta considerada una plaga cuarentenaria presente en Argentina, bajo control oficial, limitada su presencia a la provincia de Mendoza y a dos focos en la provincia de San Juan.

En San Juan hay contingencia en 27 puntos activos y cuarentenas en 26 puntos activos, con unas 150 capturas desde que se detectó la plaga. En estos lugares se han realizado controles fitosanitarios en la finca donde se detectó el insecto adulto y en las aledañas.

Dentro de esas áreas el Senasa entrega los difusores con hormonas sexuales que atraen el insecto. Se colocan 350 difusores por hectárea. Cada difusor dura 180 días de acción. Actúa saturando el ambiente con feromona sexual femenina. El macho no puede localizar a la hembra porque se confunde y cae en la trampa. Esto hace que disminuya el apareamiento, la población plaga y los, daños al cultivo.

Las medidas preventivas que deben tener los productores en el área afectada es una cosecha limpia, inmovilización del material de poda, cepas de recambio y material de conducción, inmovilización y/o destrucción. La circulación de maquinaria, cajones y bines limpios y desinfectados.

Se ha reglamentado para las zonas bajo contingencia y cuarentena que la uva para vinificar egresa solo en forma de mosto. La fruta para consumo en fresco y pasa de uva hay que fumigarla con Bromuro de Metilo.

Para el traslado de estacas, barbechos y/o plantas en maceta se necesita una autorización. La maquinaria cosechadoras de vid deben tener inscripción, documentación para circular, limpias y desinsectadas. Otros maquinarias y envases deben estar libre de tierra y restos vegetales.

Dentro de la provincia se han tomado medidas de resguardo en uva en fresco y para viificar a través de camión térmico, encarpado o cubierto con malla.

El Senasa prevé sanciones y multas a los productores que no cumplan con estas reglamentaciones.