Recientemente el Laboratorio de Análisis Químicos del Instituto de Investigaciones Mineras de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) recibió un nuevo aparato de última tecnología mundial en materia de determinación de elementos metálicos en distintos tipos de muestras. “Esta adquisición ha sido sumamente importante para nosotros. Es un equipo de última generación y la técnica es ampliamente utilizada en el mundo entero por la rapidez y eficiencia que posee para determinar la presencia de metales en distintos elementos”, expresó Rodolfo Lara, Ingeniero Químico perteneciente al Laboratorio.
La técnica de análisis ICP-OES (nombre con que se conoce a la nueva máquina de análisis químicos) sirve para la determinación de elementos metálicos en muestras de agua, minerales, alimentos, medicamentos, etc. Esta nueva metodología de análisis químicos tiene una gran ventaja sobre las anteriores y es que se pueden realizar mediciones simultáneas de hasta 73 elementos. Con tan sólo unos pocos mililitros de solución de la muestra.
Según explicaron fuentes ligadas al laboratorio, otra de las grandes y novedosas ventajas radica en la técnica de absorción atómica (FAAS). Esto se refiere a los límites de detección y la amplitud en el rango de las concentraciones de los elementos que pueden determinarse. Mientras que en la tecnología utilizada anteriormente al ICP-OES, los límites de detección eran del orden de las ppm (partes por millón), en esta nueva máquina, se alcanzan límites de detección del orden de las ppb (partes por billón). Lo que deja en evidencia la celeridad, precisión y mejoras que traerá aparejada el nuevo aparato para la industria minera y para la industria en general.
El nuevo equipamiento todavía no está oficialmente en funcionamiento, debido a que requiere de una preparación y capacitación de personal extensa. “Estamos hablando de aproximadamente dos meses de capacitación permanente. Es la Ingeniera Ivana Orozco la que ha asistido a los cursos de capacitación dictados por la empresa Perkins Elmer Argentina para luego transmitir los conocimientos y capacitar a todo el personal local”, explicó Rodolfo Lara. El nuevo aparato es construido por la firma Perkins Elmer. Sus componentes son fabricados en distintas partes del mundo debido a sus especificaciones, pero es ensamblado principalmente en Estados Unidos.
Dentro de muy poco tiempo la nueva máquina podrá ser usada diariamente para poder analizar todas las muestras necesarias (ya sea agua, tierra, mineral, etc.) que provengan del sector público o de empresas privadas. Según fuentes del laboratorio químico el nuevo aparato de análisis posee un detector de estado sólido, patentado por la empresa que lo construye. También una fuente de radiofrecuencia (también de estado sólido) y un sistema óptico purgado con nitrógeno. Posee a su vez un modo versátil de seleccionar la longitud de onda apropiada para la determinación. Esto le confiere mayor flexibilidad al análisis.
“El costo aproximado de este equipamiento en el mercado es del orden de los 250.000 dólares, asique nos consideramos muy afortunados de poder tenerlo y pensar ya en trabajar lo antes posible con él”, concluyó Rodolfo Lara.

