En nuestro país se cree que las personas que invierten son solo aquellas que cuentan con un amplio margen de capital, como se dice en la jerga popular “el millonario”. Pero esto no es así, simplemente es necesario conocer un poco sobre el procedimiento y contar con un asesoramiento adecuado si es la primera vez.

Gabriel Matus, integrante de Finanzas Jóvenes, detalla cómo es el panorama en el mundo de la inversión, para hacer rendir tu dinero.

Para invertir por primera vez hay que contar con una cuenta en algún banco y en un bróker. Para entenderlo de manera sencilla, el bróker es un intermediario, que puede ser individuo o institución, que organiza las transacciones entre un comprador y un vendedor de ciertos sectores a cambio de una comisión cuando se ejecuta la operación. Estas entidades venden acciones o bonos, entre otros. Gabriel afirma que la cuenta en bróker no demora más de 5 minutos, por lo que no representa un trámite complejo.

Hay brókers que piden recibo de sueldo como comprobante, mientras que hay otros que no solicitan ningún comprobante o requisito similar. Los principales son Bull Market, PPI, Balanz, Rava, Ecovalores, Invertir Online entre otros. Cada uno de ellos tiene distintas comisiones que cobran diversos porcentajes según el servicio que ofrecen, por lo cual, es importante asesorarse previamente antes de abrir una cuenta.

Quizás una de las principales dudas antes de invertir es la cantidad que permite el mercado. La creencia popular indica que hay que contar con montos elevados para poder invertir, pero esto no es necesariamente así, ya que el mínimo de inversión es de $1000. “Hay acciones que por ejemplo tiene un valor de $2,46, pero hay que comprar cierta cantidad de acciones, hasta alcanzar los $1000”, comenta Gabriel.

Dónde invertir no es una cuestión menor. Si bien se puede invertir en empresas nacionales, Gabriel sugiere invertir en Cedears (títulos que representan acciones de empresas cotizantes en los mercados internacionales y que pueden ser negociados en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires). Un Cedears sería por ejemplo Banco Comafi, que compra acciones estadounidenses, chinas o brasileras y las revende a los argentinos, cobrando una comisión. En Cedears hay empresas como Apple, Tesla, Amazón, Google, Mercado Libre, Alibaba, entre otras con precios accesibles y que siempre van a estar en crecimiento.

Como consejo, Gabriel sugiere “no poner todos los huevos en la canasta”. Esto significa no invertir todo el dinero en una misma empresa ya que, si esta va a pérdida, se puede perder todo lo invertido. Lo ideal sería distribuir el dinero en varias empresas o activos.

No hace falta ser un experto en finanzas, economía o matemáticas para invertir, simplemente puede hacerse contando con un mínimo de conocimiento. Si no se conoce la empresa, es mejor apostar en las grandes, aquellas que seguirán creciendo, para evitar riesgos. Ante cualquier duda, es mejor asesorarse o consultar con la gente de Finanzas Jóvenes.

Colaboración:
Gabriel Matus. Técnico electrónico, integrante de “Finanzas Jóvenes”.