Entre 1961 y el 2019, en el mundo la producción aumentó 4 veces a nivel mundial, mientras que lo hizo 8.8 veces en Argentina. Esto se debe fundamentalmente a la expansión en área más el uso intensivo de insumos y recursos frente a un mundo que hacia el 2050 deberá aumentar la producción alimentaria entre un 50 y un 100% para abastecer la población. 

Pero un dato preocupante es que si bien en los últimos años la reposición de nutrientes del suelo viene creciendo, todavía no alcanza a compensar lo extraído por la producción agrícola. Sólo cabe mencionar que entre 1993 y 2020 el costo de ese balance negativo, considerando el valor promedio de los fertilizantes, equivalió a unos U$S 20.000 millones. 

Al inaugurar el ciclo de conferencias "Fertilizar más y mejor" organizado por Profértil, la mayor empresa de fertilizantes del país, el especialista Fernando García detalló la situación actual del balance de nutrientes en los principales cultivos del país. En la presentación, Mirta Toribio -coordinadora de Investigación y Desarrollo de Profértil- indicó que "sabemos el doble desafío que tenemos todos, que es producir más para una población creciente, cuidando el medioambiente, es decir pensando en la sustentabilidad de los sistemas productivos y para ello es indispensable capacitarnos, generar datos locales y trabajar con las mejores prácticas de manejo para la nutrición".

A través del Pool de Periodistas, Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO participó del selecto ciclo donde se analizó la sostenida demanda mundial de alimentos, fibras y biomateriales que requiere de aumentos en la producción agrícola con el desafío, y la oportunidad, de desacoplar esos incrementos en producción de externalidades sociales y ambientales negativas. 

YPF y la empresa Canadiense Nutriens anunciaron en noviembre del año pasado una inversión U$S 1.200 millones para duplicar la produccién en Bahía Blanca.

La nutrición de suelos y cultivos constituye un factor necesario para que el sistema de producción sea efectivo y eficiente en el uso de recursos e insumos. Los nutrientes del suelo y el aporte externo de los mismos vía fertilizantes, enmiendas, abonos orgánicos y reciclados, constituyen recursos e insumos vitales para la intensificación sustentable de la producción agrícola. Ese fue el marco que describió el ingeniero agrónomo Fernando García -investigador y docente universitario- al iniciar su conferencia sobre Balances de Nutrientes y Brechas de Rendimiento en la Argentina.

"En nuestro país, los balances de nutrientes, es decir la diferencia entre los nutrientes que aplicamos con fertilizantes, abonos y enmiendas, y los que removemos en granos o forraje, han sido históricamente negativos" indicó el especialista en nutrición vegetal y de suelos. García, quien aclaró no conocer los suelos cuyanos, explicó que hasta mediados de la década de 1990 se reponía 20-30% del nitrógeno y del fósforo removido en los granos. "A partir de ahí esa reposición mejoró con el incremento en el uso de fertilizantes, pero hasta el día de hoy es negativa, llegando al 40-60% del nitrógeno y el 50-70% del fósforo en los mejores años". 

El especialista señaló que estos déficit o balances negativos de nutrientes se han ido acumulando a través de los años, y que se pueden estimar entre 1993 y 2020 pérdidas acumuladas de nutrientes de aproximadamente 13.7 millones de toneladas de nitrógeno, 3.4 de fósforo, 19.9 de potasio y 3 de azufre. "El costo de este balance negativo entre 1993 y 2020, considerando un valor promedio de los fertilizantes, equivaldría a aproximadamente U$S 20 mil millones".

"En los suelos pampeanos, de alta fertilidad en su condición prístina", ejemplificó García, "los balances de nutrientes negativos, asociados a otras problemáticas en el manejo de suelos, han resultado en caídas significativas en la fertilidad". El reconocido especialista explicó que el relevamiento de suelos pampeanos realizado en 2018 por el INTA y la Asociación Fertilizar, muestra una importante disminución de los niveles de materia orgánica y caídas en el pH, fósforo, cationes y micronutrientes como zinc y boro. En el caso de la materia orgánica, por sus numerosas propiedades y su importancia en la calidad y salud del suelo, esta pérdida va mucho más allá de su función como reservorio de los principales nutrientes (nitrógeno, fósforo, azufre, zinc, etc.) y está asociada fundamentalmente a la falta de rotaciones (monoculturas) y períodos de barbechos desnudos prolongados que reducen la incorporación de carbono.

 

EN NÚMEROS

  • 345  empleados directos, 1.500 empleados indirectos y más de 850 proveedores activos tiene Profértil, de YPF y el Grupo Canadiense Nutriens.
  • 8,8  aumentó la producción de alimentos en Argentina. En el mundo aumentó 4 veces desde el 1961 por la expansión en área y las tecnologías

 

 

Rendimientos

 

  • Cómo tomar decisiones en terreno

El ingeniero Fernando García, consultado por los pasos a seguir para un buen programa de conservación de suelos, indicó que "la toma de decisión de la fertilización se basa en el diagnóstico de la fertilidad del suelo y de la nutrición del cultivo en cada ambiente dentro de cada lote en el cual trabajamos". Y aconsejó: 

 

  •  Análisis de suelo, evaluación del perfil del suelo, disponibilidad inicial de agua, presencia de napas.
  •  Historia del lote/ambiente: rendimientos y fertilizaciones anteriores.
  •  Rendimiento alcanzable, Año climático.
  •  Monitoreo del estado nutricional del cultivo: Análisis foliar, sensores remotos y locales, imágenes, franjas de saturación.

"Sin dudas el punto central es caracterizar el suelo y su estado de fertilidad y el análisis de suelo es inicial en esa evaluación. Vale destacar que, a nivel regional, el muestreo de suelos es una tecnología que aun siendo de bajo costo es poco utilizada, se estima que se muestrea sólo un 20-30% de los lotes que se siembran", destacó.

El especialista señala que el diagnóstico permite cubrir los dos primeros "Requisitos": la fuente nutriente y la dosis correcta y remarca que ambos son clave para que la toma de decisiones sobre fertilizar mejore la productividad -achicando la brecha entre los rendimientos actuales y los alcanzables-, sea rentable y minimice el impacto ambiental y social.

En cuanto a la decisión sobre el momento y forma correcta para realizar la fertilización, señaló que es importante recurrir a la información científica-tecnológica, especialmente la local, que constituye una guía para considerar las alternativas que serán más efectivas y eficientes para cada lote y cada ambiente según el sistema de producción.

PROFERTIL

Es una compañía dedicada a la producción de los fertilizantes necesarios para optimizar el rendimiento de los cultivos de una manera sustentable. Integrada en partes iguales por YPF y Nutrien Inc., tiene su planta productiva en el puerto de Ingeniero White hace 20 años. Allí produce anualmente 1.320.000 toneladas de urea granulada, el principal fertilizante nitrogenado para el suelo.

 

MÁS DATOS
Para mayor información:
Sitio web: www.profertil.com.ar