Cultivar el suelo es servir a la patria. Simple, pero real. Todos lo saben. Producir es crecer.
El crecimiento de la población ha promovido cambios en el uso del suelo al demandar cada vez más bienes y servicios, esto se ve reflejado en la expansión de la frontera agrícola que, en los últimos 20 años ocurrió en nuestro Valle del Tulum. La tecnificación del riego y el fomento a la inversión en agronegocios mediante manejos de políticas impositivas promovió este crecimiento.

Como producto de la intervención del hombre, los mencionados cambios de uso tuvieron un impacto positivo sobre la calidad del suelo permitiendo rehabilitar terrenos no cultivados, que estaban abandonados por excesiva salinidad o por presencia de napa freática superficial. Sin embargo hubo muchas situaciones que por desconocimiento de las características del suelo, ese cambio fue negativo generando erosión hídrica y eólica al quitar la cobertura vegetal formada por gramíneas y arbustos que, aunque escasa, permitía mantener estable el terreno evitando pérdidas de suelo por acción de fuertes vientos o lluvias.

El desafío que debemos plantearnos es el de armonizar la obtención de altos niveles de producción agropecuaria y forestal, con la conservación a largo plazo de los ecosistemas que sustentan a las comunidades. En tal sentido es preciso que la información de suelos y de clima esté al alcance de quienes deben tomar decisiones.

Profesionales de la talla de Germán Babelis, cordobés radicado hace mucho tiempo en San Juan han trabajado seriamente y en los últimos tiempos se ha logrado actualizar el mapa de suelos a una plataforma on line.

En sus palabras "desde el INTA se está trabajando en la digitalización de una gran cantidad de información de suelos generada a partir de mediados de la década del 70 hasta la actualidad y que hoy se encuentra archivada y con riesgo de deteriorarse. El objetivo es que dicha información esté al alcance tanto de organismos responsables de toma de decisiones como de todo aquel que esté vinculado con la producción agropecuaria como lo son productores, profesionales asesores, investigadores, docentes, inversores y tasadores inmobiliarios, entre muchos otros." 

"Como herramienta para tal fin, hoy contamos con el Sistema de Información de Suelos del INTA (SISINTA). Esta es una plataforma desarrollada por el Instituto de Suelos de INTA, que permite almacenar información de perfiles de suelo geo-referenciadas del país. Al ingresar, el usuario podrá navegar sobre un mapa del territorio nacional que permite acercamientos y visualización de íconos rotulados en los cuales al seleccionarlos ingresará a toda la información disponible del sitio específico. En San Juan, recientemente hemos comenzado a cargar información de perfiles de suelo generada tanto en estudios públicos como privados.

Entre los datos de carga se destaca las coordenadas geográficas del sitio, descripción de paisaje, material originario del suelo, descripción físico química de cada horizonte o capa de suelo descripta hasta una profundidad de 1,5 m o más, comentarios de la valoración actual del lugar, potencialidades y limitaciones de uso, así como también, en algunos casos se pueden ver imágenes del lugar o pozo realizado." 

Destacó asimismo que "otra plataforma desarrollada por la institución, el GeoINTA, permite cargar mapas de suelo departamentales generados por INTA, mapas de nivel de napa freática y mapas de calidad de agua subterránea que se obtengan de trabajos efectuados en conjunto con otras instituciones."

Para acceder a la plataforma ingrese a http://sisinta.inta.gob.ar/. En los próximos meses, se irá cargando información de toda la provincia. En caso de estar disponible también es posible que aquellos interesados en información de suelos de un determinado lugar consulten, vía correo electrónico, al Área de Suelos y Riego de INTA San Juan (babelis.german@inta.gob.ar o a liotta.mario@inta.gob.ar ). Otras regiones del país: rodriguez.dario@inta.gob.ar.