Todavía demorado en su vigencia, el tratado comercial presupone la liberación de más del 90% del comercio de bienes. Sectores críticos verán incrementada la competencia. Según escribe Ezequiel Chabay, en El Cronista, el gobierno de Jaír Bolsonaro reveló el cronograma de reducción de aranceles que forma parte del acuerdo de asociación estratégica con la Unión Europea (UE), firmado en julio de 2019, y que supondrá la desaparición de barreras a la importación de bienes del viejo continente. 


Este y otros detalles de la negociación que permanecían reservados fueron publicados la semana pasada por la cancillería brasileña y la Comisión Europea, como una forma de dar "transparencia" al proceso y "consolidar lo ya acordado".


Resistido en una considerable porción de la industria argentina y brasileña, rechazado de plano por el agro europeo y los ambientalistas, el acuerdo entre el Mercosur y la UE supondrá la eliminación del 72% de los aranceles de importación que hoy en día pesan sobre la producción europea, en un cronograma de desgravación tarifaria que comenzará, para algunos sectores, ni bien se ratifique el tratado, y se ampliará con reducción de las cargas impositivas en cuatro, ocho, 10 o 15 años.


Los documentos a los que accedió El Cronista también revelan las concesiones que ofreció la Argentina durante el gobierno de Mauricio Macri. El Gobierno deberá abrir una cuota de importación de 15.500 vehículos europeos con un arancel del 50% más bajo al actual, es decir, del 17,5%, ni bien se ponga en marcha el acuerdo. Del mismo modo, muchos de las autopartes gravadas con el 35% o 20% se unificarán en gravámenes del 10%. 


Otros bienes industriales que hoy en día tributan la tarifa más alta, del 35%, se verán sensiblemente reducidos a la hora de ser importados. Por ejemplo, los neumáticos para todo tipo de rodados -hoy en día en falta, a punto tal de suscitar un reclamo de la oposición en el Congreso- pasarán a pagar un arancel del 10%. Buena parte de la indumentaria y sus insumos, que pagan entre 35% y 26%, pasarán a pagar 8%; el calzado, con aranceles de 35% o 20%, pasará a 10%.