Se está desarrollando en la provincia el "Taller sobre Ampelografía" que es organizado por el Gobierno de San Juan, el Instituto Nacional de Vitivinicultura, el Centro de Ingenieros Agrónomos y la Cátedra de Viticultura de la Facultad de Ingeniería, de la Universidad Nacional de San Juan. El objetivo del mencionado taller es poder brindar conocimientos teóricos y prácticos a los profesionales y estudiantes de la agronomía y enología para la correcta determinación y uso de las variedades de vid que existen actualmente en la provincia y la Argentina.

El término ampelografía proviene del griego (ámpelos "vid" + gráphos, "escritura"), define el área de la ciencia de la botánica que estudia la identificación y clasificación de las vides (vitis).

Históricamente esta clasificación se realizaba mediante la colección y registro de las hojas de la vid y las bayas de la vid (uvas). Actualmente esta ciencia ha evolucionado de mano de la tecnología y los avances de más recientes del estudio de las vides ha sido revolucionado por la huella de ADN.

Aprender sobre ampelografía es muy útil para la elaboración de vinos de calidad clasificando las mejores vides en función del terruño, así como para la obtención de clones que mejor se adaptan a una región.

Durante mucho tiempo en los viñedos la gente les ha dado a las uvas un nombre cuando en realidad tiene otro (Barbera a la Bonarda) o a una misma uva los productores le dan diferentes nombres (Malvacía o Moscato D'Asti al Torrontés Riojano). Determinar los nombres correctos para las uvas es el objetivo principal del taller. 

"Este taller se inicia en diciembre con charlas online por Zoom y Youtube y prácticas a campo en fincas que tienen los varietales definidos en racimos en estado verde. En febrero el taller continúa con los varietales ya con uvas maduras y así completamos parte del ciclo. Creemos que es una capacitación de vital importancia para los técnicos sanjuaninos" explicó a  Suplemento Verde el ingeniero agrónomo Fioravante Da Rold, Director de Asuntos Vitivinícolas, perteneciente a la Secretaria de Agricultura y Ganadería del Ministerio de la Producción y Desarrollo Económico.

Por su parte Hugo Carmona Torres, vicepresidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura, dijo que el organismo nacional se pone a disposición para brindar actualización en cuanto a variedades y debe ser una tarea permanente por cuanto hoy aparecen nuevos cepajes y se actualizan otras nuevas, como por ejemplo las uvas patrimoniales y criollas, que hoy ya van tomando nuevas denominaciones incluso ya hay elaboraciones de vinos comerciales con ellas caso Moscatel Amarillo, Criolla Chica o Listán Prieto, Moscatel Negro, Canela, etc.

El taller a campo, con medidas bajo protocolo Covid, comenzó el sábado pasado con las uvas blancas en fincas de 9 de Julio y Caucete y contó además con profesionales nucleados en el Centro y Consejo de Enólogos de San Juan. El pasado jueves 17 se continuó con uvas tintas y criollas y hoy sábado las clases prácticas se realizarán en fincas de Rivadavia y Valle de Zonda.