Según Washington Post se le ordenó a los empleados del Servicio de Investigación Agrícola (ARS), entidad que depende del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, que dejaran de publicar documentos y comunicados de "divulgación pública", lo que generó preocupación en el mundo agropecuario. 


La directora del ARS, Sharon Drumm, envió un mail a todos los empleados que decía lo siguiente: "Iniciando de inmediato y hasta nuevo aviso, ARS no publicará ningún documento de cara al público. Esto incluye, pero no se limita a, comunicados de prensa, fotos, hojas informativas, fuentes de noticias y contenido de medios sociales".