Un nuevo sistema robótico de recolección de fruta, construido por la firma de desarrollo Cambridge Consultants, emplea un complejo procesamiento de señales para recolectar y clasificar frutas de forma irregular sin dañarlas. El robot podría aumentar la productividad en toda la cadena alimentaria clasificando frutas y hortalizas y, por ejemplo, identificando y eliminando malas hierbas de entre los cultivos en un campo.

Mediante un hardware económico y accesible, como el sensor Kinect de Microsoft, los científicos han diseñado algoritmos intuitivos para dotar al sistema robótico de la capacidad cognitiva para discernir la mejor forma de manipular productos que varían en forma en incluso en color.

‘Los sistemas robóticos tradicionales suelen coger exactamente el mismo objeto de exactamente el mismo lugar y trasladarlo a otro sitio, repitiendo la misma acción una y otra vez. Sin embargo, hay lugares y aplicaciones en los que actualmente no se usan robots y donde se podría si pudiéramos modificar su capacidad de enfrentarse a variaciones y pequeños cambios en el entorno en el propio sistema robótico’, explica Chris Roberts, director de robótica industrial en Cambridge Consultants.

Para poder ser una herramienta útil para los productores de frutas y hortalizas, el robot tiene que reconocer el objeto correcto y calcular la orden para recolectarlo. También tiene que decidir qué sujeción emplear y planear cómo levantar y depositar cada objeto. El sistema es capaz de manejar objetos para los que no existe un modelo detallado de diseño asistido por ordenador (CAD), según Roberts. Fundamental para la viabilidad del sistema es el diseño del sistema de sujeción, que debe adaptarse a la forma de la fruta y sujetarla con firmeza sin dañarla. ‘El sistema de sujeción cuenta con un sensor en el interior para poder sentir la presión de los tubos de vacío mientras se cierran en torno a la fruta’, añade Roberts. Este robot es un sistema inteligente que combina diseño de programación, electrónica y mecánica.