Un libro que no aparece, expedientes de minas que nunca volvieron, muestras de minerales que nadie sabe dónde están. Estas son algunas de las situaciones que se vive en el Ministerio de Minería diariamente. O cuando se realiza alguna consulta sobre algún libro o expediente minero antiguo de la provincia. Los motivos por los cuales estos documentos históricos no aparecen son varios: el tiempo, el desorden, la mudanza y la falta de interés. Sin embargo, recientemente, Marcelo Maidana, director del Área Técnica Geológica Minera, inició un programa que pretende recopilar todos los elementos perdidos o desordenados.

“La idea es juntar los libros, los mapas, las fotos satelitales, los muestreos y expedientes que con el tiempo, el desorden y la mudanza desde el edificio 9 de Julio al Centro Cívico se fueron perdiendo”, explicó Maidana, y continuó: “Es fundamental volver a armar la biblioteca del Ministerio de Minería, que actualmente son muchos libros desordenados y amontonados. También se ha decidido armar un museo con todas las cosas de minería, pero primero hay que ver qué hay, ordenarlo y luego buscar un lugar para poder comenzar a armarlo”.

Según informó José Rodríguez, empleado del ministerio y encargado del depósito donde se almacena los libros y mapas, cuando se realizó la mudanza al Centro Cívico algunas cosas fueron mandadas al sótano y otras llevadas a la oficina de la Policía Minera. “Es bueno que se quiera rescatar el valor histórico que tienen estos libros y documentos. Es parte de la minería de la provincia. Hay documentos del origen de la minería en San Juan, eso no se puede perder. Pero para ordenar, registrar y armar se necesita tiempo y personas que trabajen en ello, pero acá cada uno tiene su trabajo también”, expresó Rodríguez.

El secretario de Minería de San Juan, Juan Carlos Bustamante, expresó: “Es muy gratificante tratar de recopilar gran parte de la historia de la minería sanjuanina. Es algo que se tendría que haber tratado de hacer antes, pero hay mucho que hacer dentro del ministerio. El tema es que hay cosas que son prácticamente irrecuperables. Hace más de 30 años se prestaron imágenes satelitales a la Universidad Nacional y nunca fueron devueltas. Existen abogados que se llevaron un expediente y nunca más se volvió a saber nada de ese expediente, sólo por dar algunos de los ejemplos”.

A su vez, según explicaron fuentes encargadas de la recopilación y futura organización, puede que exista demoras para reorganizar la biblioteca y armar el museo. “Esto se debe a que el Ministerio de Minería en sí se está reestructurando. Se está redefiniendo funciones y áreas para tener una mejor organización y funcionamiento. Y eso lleva tiempo, por lo tanto lo de la recopilación también. Más que nada porque también son pocas las personas afectadas al programa de recopilación. Y estos a su vez cumplen funciones dentro del ministerio y no siempre tienen tiempo para ir hasta la Policía Minera o bajar al sótano a tratar de organizar”, expresó Maidana.

La gran mayoría de los elementos, muestras, libros, expedientes, mapas e imágenes que se pretende recuperar resulta obsoleta para la tecnología que se aplica actualmente en la industria. Sin embargo, son parte de la rica historia minera de la provincia de San Juan. “Nos va a llevar un tiempo, primero hay que ver donde está cada cosa. Existe un registro general, una base donde se consulta qué libro o expediente falta. Y de ahí se procede a buscarlo. No es una tarea sencilla, pero resulta muy importante realizarla”, concluyó Maidana.