El presidente estadounidense consideró que es un momento significativo para la democracia occidental. Además, dijo que era "una señal a los regímenes ilegítimos de Venezuela y Nicaragua".
La organización alerta sobre "principios vulnerados" en el proceso electoral.
Países de la región, la OEA y la UE reconocieron la proclamación como una vía para recuperar la democracia.
No reconocen la legitimidad del gobierno de Maduro y piden nuevas elecciones. Paraguay rompió relaciones.