El Fondo Monetario Internacional publicó ayer el informe técnico (staff report) sobre la séptima revisión del programa que el directorio ejecutivo del organismo aprobó el miércoles, con una detallada descripción de los compromisos económicos que tomó el gobierno de Javier Milei que contiene un severo ajuste y el fin del cepo cambiario hacia mitad de año.

En el documento, el FMI hace una descripción general de la situación argentina y dice que espera que el plan de ajuste y la devaluación inicial del Gobierno pesen fuerte en la demanda y la economía se contraiga hasta una recesión que podría llegar a una caída de 2,8% del PBI. Mientras tanto, señala que la inflación se acelerará en el corto plazo por los desajustes relativos de los precios, aunque se espera que haya luego una baja de inflación hacia fin de año. Y aseguran que la balanza de cuenta corriente pasará a tener superávit (más de 4 puntos porcentuales del PBI este año), respaldado por un repunte de la exportaciones.

El Fondo enumeró también los puntos clave de programa a los que se compromete el Gobierno.

Señala que las autoridades buscan lograr un superávit primario del 2% del PBI este año, principalmente, a través de una combinación de impuestos temporales (relacionados con el comercio) y medidas para reducir los costos administrativos, los subsidios a la energía y el transporte, las transferencias discrecionales a las provincias y a las empresas estatales, y el gasto en infraestructura.

El Gobierno se comprometió, para llegar al equilibrio de las cuentas nacionales, reducir sus gastos en 3% del PBI. De ese total, 0,5% del producto ahorrará en subsidios a la energía a través del aumento de tarifas. Se aplicarán aumentos iniciales en las tarifas de electricidad de más de 200% y en las de gas, de más de 150%, a partir de febrero. En lo que respecta a los aumentos de gas, sin embargo, el Ministerio de Economía decidió postergarlos para marzo, según le informó a las empresas distribuidoras de gas.

También se comprometió a levantar las restricciones cambiarias "en el corto plazo", es decir, a fines de junio, y que la política cambiaria "debería continuar asegurando los objetivos de acumulación de reservas: U$S 10.000 millones en 2024".