El Ministerio de Salud reportó ayer 25 muertes por coronavirus, la mayor cifra de fallecidos en el país desde que comenzó la pandemia, y 929 casos positivos.

Estos datos objetivos -no deseados- acompañaron anoche el anuncio del presidente Alberto Fernández de la extensión del aislamiento social preventivo y obligatorio al menos hasta el 28 de junio, o sea, otros 21 días ya que la actual vence el 7 de junio. Es decir, la más larga anunciada desde la primera que arrancó el 20 de marzo pasado.

Los datos del reporte del día fue también casi un aval a la posición del Presidente que ayer antes del anuncio le pidió a los gobernadores "no relajarse" porque "es falso que el tema esté superado, todavía no pasó".

En esta nueva etapa de la cuarentena tendrá un doble impacto. El interior del país libre de circulación del virus pasa a la fase 5 "la del distanciamiento social", con la apertura de prácticamente todas las industrias y la autorización de muchas otras actividades tanto al aire libre como deportivas, incluso reuniones. Pero el aislamiento seguirá casi como hasta ahora en el ámbito del Area Metropolitana de la Ciudad y provincia de Buenos Aires donde la flexibilización será a cuentas gotas.

Allí, se desarrolla el foco de coronavirus del país ya que concentra la mayoría de los contagios diarios con crecimiento de la circulación comunitaria del virus.

Sobre la nueva etapa en las provincias, el jefe de Estado anticipó que en los lugares donde se flexibilizará la cuarentena podrá haber reuniones de no más de 10 personas, ya sean eventos privados o públicos, y tendrán que mantener una distancia de dos metros.

Seguirán están prohibidos los eventos en espacios públicos o privados de cualquier tipo con más de 10 personas; los cines, teatros, clubes y centros culturales; el transporte público de pasajeros interurbano, interjurisdiccional e internacional, salvo para los casos de trabajadores y trabajadoras esenciales; y la actividad turística. También seguirá prohibido el ingreso de extranjeros al país. En tanto, deberán hacer la cuarentena quienes regresen al país, los que presenten síntomas; los que sean casos confirmados y sus contactos estrechos.

Además del Area Metropolitana, el aislamiento obligatorio también se mantiene en el Gran Chaco, el Gran Córdoba, Neuquén, Río Negro y Trelew, en Chubut. En tanto, en el resto del país implementará un "distanciamiento preventivo", con pocos o nulos casos de coronavirus.

En este escenario con dos realidades en el país, se reavivaron las diferencias entre el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, respecto a cómo superar el dilema de las combinadas crisis sanitaria y económica.

Para tratar de descomprimir esas tensiones, la Casa Rosada definió un camino que permita "oxigenar" las restricciones en la región metropolitana bonaerense.

En el caso de la Ciudad, se ampliarán los permisos para realizar actividades de esparcimiento, mientras que en la provincia de Buenos Aires se continuará con la reapertura de industrias. En ese sentido, Kicillof, anunció que se implementará un "sistema de fases para los 135 municipios de la provincia, de acuerdo con sus diferentes realidades".

Indicó además que la última fase, la 5, se dará cuando los municipios muestren que no tuvieron casos de contagios en 21 días, algo que -dijo- ya ocurre en 61 comunas del total de 135.

Por último, Alberto aseguró que mantendrá la ayuda social como así también a distintos sectores de la economía y el trabajo para sobrellevar los efectos de la crisis por el coronavirus.

Mal para jubilados

El Poder Ejecutivo envió anoche al Congreso un proyecto de ley para prorrogar hasta diciembre las atribuciones que le había otorgado el propio Parlamento para definir el aumento de los jubilados y pensionados mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNI), mientras se analiza una nueva movilidad jubilatoria.