Julio De Vido, el ex ministro de Planificación Federal que está detenido en el penal de Marcos Paz, le contestó este jueves a Juan Chediack, el empresario que dijo haberle dejado dinero de coimas en el baño del ministerio y sostuvo que lo visitaban para pedirle "privilegios".

"Para lo único que venían a verme era para pedir privilegios para sus empresas, que por supuesto nunca le dimos. Y cuando iban al baño lo único que dejaban era mal olor y orín en la tabla del inodoro. Es un refrito de las infamias y mentiras que mostró Lanata hace varios años", escribió De Vido en su cuenta de Twitter.

En su declaración, Chediack, uno de los primeros empresarios arrepentidos en la causa de los cuadernos de la corrupción, deslizó que visitó a De Vido en su casa y que el ministro le dijo que fuera a su despacho en el ministerio y dejara el dinero en el baño. 

El empresario confió haberle pagado dos veces en su casa y tres en el ministerio, y que las entregas de dinero, que según él era utilizado para la política, se hacían mensualmente.

Las sumas iban de 100 mil a 250 mil pesos y, según contó, era De Vido quien lo llamaba para exigirle los pagos si es que se atrasaba.

En la misma declaración Chediack dijo que el ex secretario de Obras Públicas José López era "intratable" y que ganó importancia después del fallecimiento de Néstor Kirchner, y que se jactaba de hablar directamente con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

También apuntó contra el financista Ernesto Clarens, quien, según su testimonio, fue el encargado de explicarle que para trabajar había que pagar y el primer en llamarlo para pedirle 250 mil pesos.

Para el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli, Clarens fue, después de la muerte de Néstor Kirchner, una de las puntas del “triángulo” de la recaudación de las empresas de la construcción, junto con Cristina Kirchner y el ex secretario de Obras Públicas, José López, otro de los arrepentidos que aportó información clave sobre él.