El papa Francisco recibirá al presidente Alberto Fernández el viernes 31 de enero en la Biblioteca Privada del Palacio Apostólico del Vaticano, en el primer encuentro de ambos desde el recambio gubernamental en Argentina.


La reunión, prevista para las 11 de Roma (las 7 de Argentina), fue confirmada ayer por fuentes del Vaticano y del gobierno, con lo que terminaron las especulaciones sobre ese eventual encuentro.


Francisco y Alberto tienen muy buena sintonía y una mirada coincidente sobre cómo abordar la economía y la agenda social que tiene a los más necesitados como prioridad. Lo único que lo pone en veredas opuestas -por razones obvias- es el aborto. Francisco defiende la vida desde la concepción, mientras Alberto ya confirmó que próximamente enviará al Congreso un proyecto de ley para intentar legalizar el aborto en Argentina después del intento fallido de 2018. 


Fernández entrará al Palacio Apostólico desde el denominado Patio del Belvedere, donde estará izada la Bandera Argentina, y allí será recibido por representantes de la Prefectura de la Casa Pontificia, detallaron a Télam autoridades de protocolo de la Santa Sede.


Desde allí, Fernández y la delegación serán acompañados por los denominados "Gentiluomini", un cuerpo de laicos dedicados a la Iglesia que, con frac y emblemas de la Santa Sede, guiarán el camino del mandatario hasta su encuentro con Jorge Bergoglio.


Luego, el encuentro comenzará con un saludo de recibimiento en la denominada sala del Tronetto, en el segundo piso del Palacio, y luego los dos jefes de Estado pasarán a la reunión a solas en la Biblioteca, según la praxis vaticana.


Tras la reunión, y luego de un saludo formal del pontífice a la delegación argentina que llegue a Roma, Jorge Bergoglio y Fernández harán el tradicional intercambio de regalos.


La última visita de Fernández al Papa fue en agosto de 2018, en ocasión de un encuentro en la residencia de Casa Santa Marta del que también participaron el dirigente chileno Carlos Ominami y el brasileño Celso Amorim.


En diciembre, la pareja de Fernández, Fabiola Yañez, se reunió con el pontífice junto a otras cuatro primeras damas latinoamericanas en el marco de la inauguración de la nueva sede de la fundación pontificia Scholas Occurrentes, creada por Francisco a partir de sus experiencias como cardenal porteño.


La noche del lunes, en una entrevista televisiva, el Presidente destacó que le "gustaría mucho ver" al sumo pontífice.


Tras resaltar que Francisco "sabe" lo que él lo valora y lo quiere, remarcó que "celebraría que viniera la Argentina", aunque aclaró que "el viaje a la Argentina es una decisión de él". Y, enfatizó: "El Papa no está en ningún bando, está por encima de todos nosotros".


Fernández será el segundo mandatario recibido en 2020 por Francisco, quien este viernes tendrá una audiencia con el mandatario del Congo, Félix Antoine Tshisekedi Tshilombo, a las 10.30 de Roma.


La última visita oficial de un mandatario argentino al Vaticano fue la que realizó el entonces presidente Mauricio Macri en octubre de 2016, cuando viajó a Roma en ocasión de la canonización del denominado "cura santo", José Gabriel Brochero. 


En esa ocasión, Francisco, a quien siempre se lo denominó como "el Papa peronista", no ocultó su malestar con Macri por su política económica neoliberal. Nunca sonrió para la foto. Fue la contracara de las visitas que le realizó la expresidenta Cristina Fernández que logró toda la atención del Papa que incluso mandó regalos para su nieto. Todo a pesar de que durante la gestión K mudaron al interior del país el tradicional Tedeum del 25 de Mayo para evitar a Jorge Berglogio, entonces arzobispo de Buenos Aires, en la Catedral Metropolitana. 


Desde la asunción de pontífice en marzo de 2013, la alemana Angela Merkel es la que más veces lo visitó en el Vaticano, con seis visitas. 

Estrena embajador

El paso de Alberto Fernández por el Vaticano marcará también una jornada central para el flamante embajador argentino, Luis Bellando, recién elegido por el Ejecutivo. Se estima que en los próximos días se formalizará la designación de este diplomático de carrera.