La incógnita quedará despejada recién hoy cuando el Gobierno reciba el informe meteorológico que detallará cuáles son las previsiones climáticas para los próximos días. En ese momento el presidente Alberto Fernández y su entorno más cercano sabrán si el plan de celebrar el 25 de Mayo en la Antártida será posible o si habrá que buscar una actividad alternativa para esa jornada. Así, el jefe de Estado evitaría su presencia en el tradicional Tedeum que se realiza cada año en la Catedral Metropolitana.

Lo encabezará el arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, quien el año pasado ya esbozó críticas hacia el Gobierno nacional de Alberto Fernández cuando solicitó "grandeza" y más "diálogo" para enfrentar a la pandemia de covid-19.

En este momento, desde el entorno presidencial aseguran que al presidente Alberto Fernández "no lo entusiasma mucho" la idea de presenciar el Tedeum. En Gobierno estiman que con una inflación que parece incontrolable, con altos niveles de pobreza y un descontento social en aumento contra el oficialismo, el tono de reprobación de la Iglesia podría ser mayor. En su representación podrían estar el Secretario de Culto, Guillermo Oliveri, o algún ministro.