Oriunda de la región francesa de Saboya, la uva Bonarda es la segunda variedad tinta en cuanto a superficie plantada en la Argentina, después del Malbec, según un informe oficial del INV.

Presente en la mayoría de las provincias vitivinícolas de Argentina, la Bonarda registró en el año 2019, un total de 18.305 hectáreas (ha) cultivadas, lo cual representa el 8,5% del total de vid del país.

La provincia de Mendoza tiene la mayor cantidad de Bonarda del país, alcanzando en 2019 las 15.250 ha (83,3%), seguida por San Juan con 2.267 ha (12,4%), mientras que en el resto de las provincias sólo cuentan con 788 ha (4,3%).

El informe del INV consigna que en 2019 la producción total en el país de la variedad Bonarda fue de 2.370.332 quintales. En el último año la producción de la variedad Bonarda fue un 2,3% mayor a la cosecha del año anterior.

Hace más de una década se creó el Plan de Desarrollo y Promoción de la Bonarda Argentina, mientras que San Martín, villa cabecera del departamento del mismo nombre en Mendoza, es considerada la "Capital del Bonarda" por ser ese distrito el que mayor cantidad de superficie implantada tiene con aquel cepaje: el 25% del total, con 3.758 hectáreas cultivadas.

Esta variedad ha sido utilizada durante mucho tiempo en la Argentina como base de vinos tintos comunes por sus altos rendimientos por hectárea y su sobresaliente aporte de color. Tiene gran aptitud para mejorar vinos de corte, especialmente con Malbec.

Produce vinos de colores intensos: marcados violetas o púrpuras que evolucionan al rojo rubí. Su aroma es intenso y suelen aparecer atractivas notas frutales de frutas rojas (frambuesa, frutillas, cassis o cerezas) y frutas negras (moras, ciruelas o arándanos). En boca es agradable y dulce, de buena intensidad. Sus taninos son suaves y hacen aterciopelado y elegante al vino.

En 2019, se comercializaron 73.933 hectolitros (hl) de vino varietal puro de Bonarda y 154.560 hl en corte con alguna otra variedad. Considerando que el total comercializado de vinos varietales en el país fue de 4.283.058 hl, las ventas de vinos varietales con presencia de Bonarda representaron el 5,3% de ese total.

En 2019, el 14% de los vinos varietales elaborados con Bonarda se exportó y el 86% se comercializó en el mercado interno.

En cuanto a las exportaciones de vinos varietales elaborados con Bonarda, en 2019 alcanzaron un total de 32.429 hl, por un valor FOB de 7.243.000 dólares. El 39% del total exportado en 2019 de vinos de Bonarda corresponde a varietal puro y 61% a cortes con otras variedades.

El principal destino de los vinos varietales puros en 2019 fue Canadá, seguido por Brasil.