Murió Lázaro Simón Talamonti, conocido como “León”. Se trata del nene de cuatro años que tenía cáncer, cuya historia generó una gran conmoción. Su madre Juliana Ibarra había pedido con desesperación un avión sanitario para volver a Tucumán. Lo consiguió, y el nene pasó sus últimos días en esa provincia.

Su madre escribió en la última publicación en su cuenta de Instagram: “Misericordia mi amor, bombón, así podrás descansar en paz y volar tan alto a un mundo donde no habrá dolor, donde podrás caminar, correr , jugar y seguir sonriendo con tu sonrisita que siempre te caracterizó”.

La mujer publicó: “Entendí Dios que tu voluntad es tenerlo muy cerquita tuyo. Sé que no me lo llevás, sé que no sufrirá más, sé que seguirá siendo feliz”. Explicó que los órganos del nene “ya no funcionaban”, que estaba en coma y con oxígeno. Pidió una oración por su hijo: “Pidamos misericordia para que ya no tenga más sufrimiento. Te amo tanto León”.

El nene nació de forma prematura y era conocido como “León”. Le habían diagnosticado en el Hospital Garrahan de Buenos Aires una neuroblastoma de alto riesgo estadio cuatro metastásico, e hizo un tratamiento durante cerca de dos años.

En septiembre se conoció el caso de “León”, a partir de un pedido de su mamá para pedir un avión sanitario que los trasladara de Tucumán. En la publicación en su cuenta de Instagram advirtió que ya no había “nada que hacer” y que el cáncer estaba “cada vez más avanzado”.

Ibarra explicó que hacía cerca de dos años que su hijo tenía cáncer terminal y que en el Hospital Garrahan ya no podían hacer nada más por él. Dijo que “León” estaba en un hotel bajo cuidados paliativos, que cada vez tenía “más fiebre, vómitos, dolores” y que le aplicaban morfina, que tiene una fuerte capacidad para reducir el dolor.

La mujer dijo que el único deseo que tenía el nene era volver a su casa en Tucumán. Les pidió a las autoridades provinciales que se ocuparan de los pacientes con cáncer terminal y de todos los chicos que lo necesitaban.

Contó que le habían ofrecido una ambulancia para trasladarlo a su casa pero advirtió que eso era inviable. Aclaró que el solo hecho de llevar a “León” en silla de ruedas le generaba dolor y que por eso no era una opción, en especial al tener en cuenta que se trataba de un viaje muy largo. Finalmente lograron viajar en un avión sanitario privado a Tucumán, donde el nene pasó sus últimos días.