Cuatro exmilitares fueron procesados ayer por la imposición de torturas a soldados conscriptos durante la Guerra de Malvinas, en un fallo que se trató de delitos de "lesa humanidad" y fue calificado de "histórico" por los querellantes.

Fuentes judiciales informaron que se trata de los exmilitares Miguel Ángel Garde, Belisario Gustavo Affranchino Rumi, Gustavo Adolfo Calderini y Eduardo Luis Gassino, quienes para la jueza federal de Río Grande Mariel Borruto cometieron los hechos durante una dictadura que les negó a las víctimas sus derechos de defensa.

"Para la magistrada, los hechos investigados son crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura cívico-militar, período en el que se encontraban suspendidas las garantías constitucionales", explicó en diálogo con Télam Jerónimo Guerrero Iraola, abogado del Centro de ex Combatientes Islas Malvinas de La Plata (CECIM), querellante en esta causa.

En ese sentido, aportó que, para la magistrada, "los soldados no pudieron denunciar al Estado criminal que había promovido las torturas" que recibieron por parte de sus superiores durante el conflicto bélico de 1982.

En una sentencia de más de 70 fojas a la que tuvo acceso la agencia de noticias Télam, Borruto sostiene que hubo un "despliegue" por parte del "Estado terrorista de acciones de inteligencia y psicológicas contra las víctimas de torturas, por medio de los que montaron el aparato de impunidad".

"De esta forma, a los soldados que sufrieron torturas los obligaron a callar", explicó Guerrero Iraola, quien calificó a esta resolución como "un hecho histórico en la historia judicial" de Argentina.

La jueza dispuso además embargos sobre los bienes de Garde por la suma de 5 millones de pesos, y de un millón de de pesos sobre los patrimonios de Calderini, Affranchino Rumi y Gassino.