El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, lanzó un plan con el que promete cumplir los sueños de sus comprovincianos: un terreno para cada pareja que contraiga matrimonio es una de esas promesas que llamó "Sueños puntanos".

El proyecto de ley "Un matrimonio, un terreno" establece que todo nacido en San Luis que se case "en la forma establecida por la legislación, tiene derecho a un terreno. Además, aquellos que no hayan nacido en San Luis, para acceder al beneficio tendrán que tener una residencia mínima de 10 años en la provincia", según publicó ayer el sitio online Infobae. "Esto nos va a permitir trabajar mejor en cuanto a la mirada demográfica de la provincia y de los municipios" señaló el gobernador al hacer el anuncio.

Todo el paquete, que tiene que aprobar la Legislatura y que incluye la emisión de un bono con la deuda de la Nación y la creación de un Fondo Anticrisis, demandará más de 5.000 millones de pesos de inversión en salud, educación, cultura y deportes. Según el mandatario, apunta a potenciar la economía en el contexto de la situación nacional.

Muchos de los anuncios tienen 300 días de plazo para su concreción, es decir que quiere ser él quien corte las cintas o esté al frente de las inauguraciones mientras su hermano el senador Adolfo Rodríguez Saá tiene su propio sueño, volver a ir por la gobernación.

El titular del Ejecutivo puntano, además, explicó que estos terrenos, que tendrán que tener accesos a la energía eléctrica, agua potable y cloaca, podrán ser entregados por los municipios o por la provincia.