Después de un sangrado de 3 días, una mujer de Mendoza llegó al hospital Lagomaggiore el jueves pasado. Los médicos tuvieron que sacarle el útero por la gravedad de la infección con la que se encontraron cuando le realizaron el legrado.

Directivos del hospital confirmaron que la paciente, quien vive en Las Heras y tiene 5 hijos, quedó internada en grave estado tras un aborto incompleto. Todavía no pueden determinar si fue clandestino o espontáneo, informó el diario Los Andes.

"La paciente está en coma inducido, sedada con pronóstico reservado y todavía no pueden hablar con ella. Por lo tanto, no podemos determinar las circunstancias en que se produjo el aborto y el caso no está judicializado”, explicó en conferencia de prensa el director Mario Bustos Guillén.

La mujer llegó al hospital el jueves 2 de agosto por la tarde. Entró a la guardia caminando, acompañada por su familia y tenía una hemorragia de tres días y fiebre.

Cuando los médicos la revisaron, detectaron que había restos de un aborto y decidieron hacerle un legrado. Sin embargo, durante la intervención, descubrieron que la infección era más grave de lo esperada y tuvieron extraerle el útero, los ovarios y el tronco (anexo histerectomía). Según la historia clínica, no había diagnóstico de embarazo previo reciente.