Señor director: 


Se avecinan las elecciones y la oposición entró en pánico. Muchos deberán volver al llano y esto los espanta. Es por ello que, como "jauría enloquecida'' se abalanzan sobre la presa que molesta.

Desprestigian y desean seguir confundiendo a la sociedad con falsedades, mentiras y malas intenciones tan sólo para satisfacer apetencias políticas y personales. Ayer, hasta lloró una diputada ante las cámaras televisivas por sus pobres jubilados. La citada diputada hace más de quince años que deshonra el parlamento, gana muy buen sueldo más viáticos y hace acto de presencia cuando se le da la gana. Es fácil mentir y llorar por los jubilados "que tanto ama'' y nunca hizo nada. Cuando Cristina Fernández otorgaba dos veces al año un ínfimo aumento jamás levantaron la voz. Hoy, llegando al tramo final de su gestión, salió a vociferar contra el oficialismo que, supuestamente, por error de cálculos le quitaba $20 a las jubilaciones, situación enmendada con urgencia por el Presidente de la Nación.