Los cambios en el mercado del vino son vertiginosos y debemos estar bien informados para la toma de decisiones rápidas que activen el mercado interno y externo de la vitivinicultura nacional. 

Según un informe del International Wine and Spitit Research (IWSR), la referencia mundial para datos e inteligencia sobre bebidas alcohólicas, con oficinas en Londres, los bebedores de vino en todo el mundo continúan mostrando una preferencia por el vino tinto, pero en 2018 los volúmenes cayeron en casi un 4% a medida que la demanda en los mercados de tintos franceses y chinos registró grandes caídas. La disminución representa el tercer año consecutivo y ha reducido la participación de los tintos al 54%.

Las malas cosechas en Francia, Alemania, Italia, España y Sudáfrica afectaron la demanda de vino blanco, que vio caer los volúmenes en un 0,5%, la primera disminución desde 2014. Los volúmenes pueden haber caído, pero la participación del vino blanco aumentó al 36% del mercado total. .

Las ventas de vino blanco se verán afectadas por un cambio al rosado: en los EEUU, el rosado se está volviendo menos estacional y esto está ayudando a impulsar la demanda durante todo el año. El fuerte crecimiento en los EEUU ha ayudado al rosado a aumentar las ventas globales en un 1.9%, y el rosado ha crecido hasta ocupar el 9% del mercado.

La región vitivinícola más grande de Francia, Burdeos, experimentó una fuerte caída en su rendimiento mundial del vino el año pasado. La helada dañó gran parte de la cosecha en 2017, pero fue caída de sus ventas a China el principal factor detrás de las pérdidas del año pasado. El mercado de Burdeos cayó un 10% en 2018, pero la percepción pública de los vinos de Burdeos sigue siendo positiva y es probable que las ventas repunten en el futuro.

España también sufrió una dura cosecha con 2017, registrada como la peor cosecha de uva desde 1962. Inevitablemente, esto tuvo repercusiones para la tercera región vinícola más grande del mundo: Rioja. La mala cosecha no solo limitó la disponibilidad, sino que elevó los precios, lo que pudo haber contribuido a una caída de las ventas el año pasado del 7%.

2018 fue un año excelente para los vinos de la región del Véneto en la región del noreste de Italia: los números de IWSR muestran un aumento en el volumen de ventas de casi el 8% en 2018. La demanda de vino veneciano se mantuvo fuerte en Alemania y el Reino Unido.

Estos datos reflejan un reconocimiento creciente de la creciente calidad de los vinos venecianos y los esfuerzos de la autoridad para alentar más exportaciones

La participación global del vino orgánico ahora ha aumentado a 2.4%, el equivalente a casi 690 millones de botellas de vino. 2018 registró otro aumento, aunque el aumento del 2% representa una desaceleración en los últimos años. Las razones de este crecimiento son numerosas: a medida que los consumidores se vuelven cada vez más conscientes del medio ambiente, también crecerán las oportunidades para el vino orgánico. La percepción de que el vino sin sulfitos añadidos y otros productos químicos utilizados en el proceso de crecimiento generará menos resaca al día siguiente debería aumentar el atractivo de los vinos orgánicos para el público.

Las cifras de IWSR muestran que es en Escandinavia (Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia) donde el vino orgánico se ha establecido como parte del mercado de vinos convencional: la región es el hogar de algunos de los consumidores más conscientes del medio ambiente en el mundo. En Finlandia y Dinamarca, los vinos orgánicos representan casi el 5% del vino consumido. En Noruega, se eleva a más del 10%, pero es en Suecia, donde el vino orgánico ha hecho más incursiones en el mercado, los informes de IWSR muestran que más de una quinta parte del vino vendido en el país el año pasado fue clasificado como orgánico.

En Suecia, el desarrollo del segmento de vinos orgánicos no se basa solo en los consumidores, sino que el Gobierno también participa activamente en la promoción del consumo de vinos orgánicos. El monopolio gubernamental del alcohol, Systembolaget, ofrece listados favorables y apoyo a los productos orgánicos, y sus cifras de ventas para el primer trimestre de 2019 mostraron un crecimiento del vino orgánico del 22% en el mismo período del año pasado.

De los diez principales productores de vinos tranquilos (no espumantes ni licorosos), las cifras de IWSR muestran que solo el vino estadounidense registró un aumento en el consumo el año pasado. Los resultados globales reflejan un año que fue fuertemente afectado por las malas cosechas en muchos mercados productores clave, además de la desaceleración de las importaciones chinas.

Con un 0,4%, el crecimiento de las ventas de vino en los Estados Unidos fue modesto y fue impulsado exclusivamente por las ventas nacionales, con exportaciones que cayeron casi un 2%. Las ventas locales han sido ayudadas por un marketing innovador en el espacio digital, exponiendo a los entusiastas del vino a nuevas bodegas en regiones vitivinícolas menos conocidas. El uso de envases enlatados también ha ganado impulso a nivel nacional, haciendo que el vino producido en casa sea apropiado para más ocasiones y relevante para un público más joven. 

En cuanto a exportaciones, el vino sudafricano obtuvo mejores resultados el año pasado y se vieron favorecidas por tasas de cambio favorables que permitieron un crecimiento inesperado de las exportaciones de vino de Sudáfrica en China. Alemania también produjo un marcado crecimiento para las exportaciones de vino de Sudáfrica, con la contribución de los mercados africanos en desarrollo como Namibia y Kenia.

Los volúmenes de vino chileno pueden haber bajado el año pasado, pero de las principales naciones productoras de vino, ha sido el vino chileno el que ha tenido los mejores resultados en la última década. A pesar de la disminución de las ventas nacionales, las ventas de exportación chilenas han aumentado en casi un tercio desde 2008.

VARIEDADES DE MODA

Según los números de IWSR, el Cabernet Sauvignon se mantiene como la uva más extendida en el ámbito mundial del vino: la facilidad con la que se puede cultivar y su propensión a los diferentes climas ha hecho que se adopte en las regiones vinícolas de todo el mundo. A pesar de esto, en 2018 la variedad de uva perdió participación en el mercado.

Cabernet Sauvignon fue otra víctima de las consecuencias en China, que representa el 40% de las ventas de la variedad; como tal, la caída del 9% impactó significativamente las cifras globales totales. Las ventas en los EEUU, de donde proviene aproximadamente un tercio de las ventas, se mantuvieron bastante estables.

La popularidad de Chardonnay también se basa en lo versátil que es crecer; la variedad había alcanzado su punto máximo en los años ochenta, pero las cifras de IWSR sugieren que había vuelto a aumentar hasta el año pasado. Aunque en 2018 la uva se redujo marginalmente, aún ganó cuota de mercado. Chardonnay es notablemente popular en los EEUU que representa casi dos tercios de su consumo y las ventas continúan creciendo en este mercado.

Sauvignon Blanc es la tercera uva más popular y obtuvo ganancias adicionales este año. El vino blanco aún no ha tenido un gran impacto en China, y esto proporcionó inmunidad al Sauvignon Blanc de las pérdidas de vino observadas en el mercado de vinos más grande del mundo en 2017.

El pequeño aumento en las ventas de Sauvignon Blanc el año pasado fue menor en comparación con los avances recientes, pero el mercado se ha mantenido relativamente estable y se espera que las ventas aumenten a un ritmo más rápido este año. El Sauvignon Blanc fue el primer tipo de vino que se embotelló con un tapón de rosca en cualquier volumen comercial y ha ayudado a establecer la reputación de Nueva Zelanda como un productor de vino blanco de alta calidad.

De las variedades menos convencionales, el Chenin Blanc creció significativamente el año pasado con sorprendentes ganancias de dos dígitos. El Chenin Blanc con cuerpo es adecuado para el paladar alemán y es la variedad de uva más plantada en Sudáfrica.