El consumo de bebidas no alcohólicas registró durante 2016 el nivel más bajo de los últimos seis años, mientras que el volumen de ventas de cervezas fue el más reducido desde 2010. Según un estudio difundido por IES Consultores, el consumo per cápita de bebidas cayó a un mínimo de 22 litros por habitante por año.

El segmento de gaseosas tradicionales, aguas, aguas saborizadas y jugos exhibió un volumen de ventas de 37,5 millones de hectolitros en 2016, el más bajo de los últimos seis años. El segmento de cerveza exhibió el menor consumo desde 2010, y verificó un recorte en sus ventas internas del 2,5% con respecto al 2015, indica el informe.

El consumo total de bebidas registró una caída de 7,9% durante 2016 contra el año anterior, mientras la producción bajó 7,6% en la misma comparación, según el informe privado. De acuerdo con este sondeo, la ingesta de bebidas sin alcohol cayó 10,5% durante el año pasado contra el anterior y el consumo de bebidas alcohólicas retrocedió 4,4%, registrando el vino la baja más pronunciada con el 8,6%.

En 2016, se exportó aproximadamente el 22% de la producción (el 78% se vendió en el mercado interno), porcentaje por debajo del promedio de los últimos diez años. 

Por su parte, las importaciones del sector totalizaron 85 millones de dólares, con una suba del 33,3% con respecto el 2015. Los destinos de las exportaciones de la industria vitivinícola en 2016, se concentraron en los Estados Unidos (36,1%), en el Reino Unido (11,2%), Canadá (8,4%), Brasil (5,7%), Países Bajos (4,2%), México (3,3%) y China (3,2%), países que concentraron, conjuntamente, el 72,2% de los valores de las ventas en este período.