El precio del combustible empezó a empujar distintas subas y una de las que afectará a más sanjuaninos es la del transporte público. Según fija la normativa, en enero y julio se modifican los valores de todos los pasajes de corta y media distancia del servicio de la RedTulum y, para eso, las empresas deben acordar con las autoridades de la Secretaría de Tránsito y Transporte. Los plazos ya están acotados, dado que, si la actualización se aplica el 1 de enero, el cálculo y los procesos legales toman cerca de 15 días antes para quedar efectiva. A esto se sumará otro factor, ya que Nación subsidia parte del valor de los pasajes mientras que la provincia pone otro porcentaje superior, aunque al menos los primeros fondos quedaron en duda luego de los anuncios del ministro de Economía Luis Caputo. Donde sí ya se vieron las subas por los nuevos precios en las estaciones de servicio es en el transporte de carga, que trasladaron el total del monto del gasoil, un 60 por ciento, a los viajes y, probablemente, esto impacte más en los valores de los productos.

En menos de 10 días, el combustible aumentó 67 por ciento en YPF y, según empresarios a nivel nacional y local, todo apunta a que buscan que llegue a valer lo mismo que un dólar, por lo que al actual precio de 650 pesos el litro se ubique en 800 pesos. Ese dato es el que llevarán los empresarios de ATAP, que reúne a las empresas de colectivos, junto con el impacto de las subas en repuestos, seguros y unidades, para negociar el nuevo aumento. De acuerdo a los registros de la anterior gestión, el valor del boleto de colectivo se discute a partir de todos los costos que implica tener una unidad circulando. A esto, se le resta el valor de los subsidios y, a partir de ahí, definen el boleto.

En la última revisión, empresarios pidieron elevar el valor a 267 pesos el pasaje general de distancias urbanas, aunque se contuvo en 60 pesos en la negociación, debido a que Nación aportó 380 millones de pesos mensuales en subsidio y cerca de 1.100 millones por parte de la gestión provincial. Este dinero se distribuye en las empresas según la cantidad de usuarios, haciendo una salvedad en los departamentos alejados, a los que se les aporta más, para compensar la menor cantidad de pasajeros y mayores distancias. Si bien los integrantes de ATAP no quisieron contestar las reiteradas llamadas de este medio para conocer cuánto pedirían que suba el boleto, fuentes empresariales hablaron de que solicitarían un mínimo de 550 pesos sin subsidios.

Mientras esa negociación estará atada a la capacidad que tendrá el gobierno de Marcelo Orrego y los responsables del área de Tránsito y Transporte para contener las subas, quienes ya hicieron el traslado fueron los transportistas de larga distancia. José Molina, presidente de la Cámara de Transportistas, aseguró que los aumentos de combustible que se dieron ya tuvieron que llevarlos a quienes contratan los viajes. La metodología, explicó el empresario, contempla que el cliente pague los aumentos que también se dan a mitad de recorrido, ya que, desde que sale un camión hasta que llega a destino, puede haber aumentos.

Taxis y remises

Los propietarios de taxis, remises y autos de alquiler se reunieron ayer en la mañana con Marcelo Molina, nuevo secretario de Tránsito y Transporte, para solicitar un nuevo aumento en los viajes. Cristian Flores, titular de Cape (Cámara de Permisionarios de San Juan), aseguró que pidieron un aumento base del 30 por ciento del valor de la ficha. Si bien dijo que calculan un retraso en el precio del 110 por ciento, no pedirán aplicar el total debido a que temen perder viajes. Aseguró que en el sector ya tienen una reducción de un 10 por ciento de vehículos circulando, debido a que hay muchas unidades rotas que no pueden reparar producto del encarecimiento de los repuestos y creen que, en enero, podrían ser menos vehículos porque "al chofer no le conviene estar quemando combustible".