La recaudación de impuestos provinciales en junio pasado alcanzó los 723,3 millones de pesos, lo que significó un aumento del 53,32% respecto a igual mes del año pasado, según los datos publicados en la página oficial del Ministerio de Hacienda de San Juan. 

Con ese resultado, los ingresos provinciales en la primera mitad del año ascienden a un total de 4.195.117.473, una suma que creció casi un 48% respecto a los ingresos acumulados en igual periodo en el 2018. 

Pero el ritmo de crecimiento no es el esperado, porque el fisco local tiene la meta de conseguir más recursos que la inflación prevista, y hasta ahora eso no se logra. 

En el mes de mayo el aumento del índice de precios interanual fue del 57,3% y aunque el Indec aún no divulga el guarismo del mes de junio, aumentará algunos puntos. Tanto lo recaudado en el mes de junio como en el acumulado quedaron rezagados respecto a la inflación de mayo: cuatro puntos porcentuales si se contempla sólo el mes, pero en los ingresos entre enero y junio se licúan mucho más aún, casi 9 puntos porcentuales; lo que enciende la preocupación por los gastos proyectados por el Gobierno. 

Ingresos Brutos, el impuesto que representa el termómetro de las ventas, sigue siendo el de principal peso en la recaudación provincial, y significó el mes pasado el 62,8% del total de los ingresos en Rentas. Por ese concepto ingresaron 468.679.163,39 pesos en junio, un 50% más que igual mes del 2018. Los impuestos del comercio local fueron 51.376.464,73 pesos y crecieron un 51,82% interanual, mientras que los del impuesto multilateral -de negocios cuya casa matriz están fuera de la provincia- fueron 105.305.841,37 pesos, un 49,48% más que el año pasado. En ambos casos no alcanzan siquiera al último número de inflación. Esa tendencia está acorde con la crisis y recesión actual, ya que la baja de ventas del comercio minorista tuvo en los meses de marzo, abril y mayo el peor escenario, con caídas del 11,6%, 13,6% y 12,8% respectivamente, según la Cámara de Comercio de San Juan. Recién en junio se atenuó la caída y los negocios cerraron con una baja del 3,8%, gracias al impacto del aguinaldo, ventas del día del padre y el nuevo plan Ahora 12 con menor tasa de interés. Pero el impacto de ventas de junio recién se reflejará en la recaudación de julio, porque ese impuesto se paga a mes vencido. A los otros impuestos "fuertes" les fue mejor el mes pasado: Inmobiliario en junio permitió el ingreso de 31.298.965,50 un 92,35% más que el año pasado, mientras que el automotor recaudó 62.855.399, un 83,41 superior.

Para el 2019 la provincia espera poder recaudar en total unos 8.000 millones de pesos, lo que significaría embolsar un 34 por ciento más de fondos de los que terminó percibiendo en el 2018, es decir, unos 2.000 millones de pesos más. Apunta a lograrlo a través de las medidas tendientes a reducir la evasión y la morosidad, tales como el control de pago en la vía pública de las patentes y los cruces de AFIP con otros organismos, además de intimaciones de pago y publicación de deudores, entre otros.

En la Nación

La recaudación tributaria nacional alcanzó el mes pasado los $454.442,1 millones, con un aumento interanual del 52,1 por ciento, según informó la AFIP. El cambio en la metodología de la distribución de los planes de facilidades de pago redujo los resultados del IVA, Ganancias, Seguridad Social y Bienes Personales de este año, dado que, en estos impuestos, en junio del 2018 se contabilizaron los ingresos de dos cuotas juntas de estos planes, mientras que el mes pasado se computó una cuota solamente. En el IVA, el incremento fue del 38,3%; si no se considerara la distribución adicional de facilidades de pago en 2018, las compensaciones netas realizadas, ni los dos días hábiles menos de

recaudación, la variación interanual habría sido de 46,4%. En el Impuesto a las Ganancias, el alza fue del 51,5%; teniendo en cuenta que el mes pasado operó el vencimiento del pago del saldo de declaración jurada de las personas humanas, del impuesto a la renta financiera y de la venta de inmuebles por el período fiscal 2018, junto con el primer anticipo de las sociedades con cierre diciembre por el período fiscal 2019. En el impuesto a los débitos y créditos en cuenta corriente, la suba fue del 35,5%.