En los últimos días, a nivel nacional, las concesionarias de autos advirtieron un aumento de entre 30% y el 50% en las consultas con respecto a meses anteriores, y un alza de ventas que se va reafirmando.

Están tomando para las ventas el dólar cash a valor mercado marginal (90% por encima del mercado mayorista), y ofrecen, además, los tradicionales planes de ahorro.

Aunque, por otro lado, problemas con las importaciones y la producción, determinan que se pidan sobreprecios de hasta 20%.

En números, la venta de vehículos en julio cerró en más de 33 mil unidades 0 Km, mientras en el mismo mes, pero del 2020, habían superado las 30 mil.

Se espera que agosto llegue con aumentos de precios entre el 4% y el 5% promedio.

Este tema, desde el comienzo de la pandemia, genera discusiones entre las concesionarias y las automotrices.

Desde los puntos de venta indican que las compañías modifican de forma constante los precios para compensar la crisis del 2020, pero desde las terminales replican que tienen problemas con la producción limitada de autopartes y el dólar, y por eso necesitan subir los precios.