Un edificio que fue emblema de la pujante vitivinicultura sanjuanina está desde hace casi una década en ruinas. Su enorme fachada sobre avenida Libertador parece cada día deteriorarse más por el paso del tiempo y la desidia. Ahora, una parte, vuelve a la vida y en algún punto remueve lo más rico de esa mole de cemento, su historia. 


Se trata del lugar donde otrora funcionó la tradicional champagnera Duc de Saint Remy, que está atravesando una serie de remodelaciones en una parte del edificio para que allí funcione el Colegio Saint Paul y la nueva sede que tendrá en San Juan la Universidad Siglo XXI.

El lugar es privilegiado, sin dudas, a pesar que debieron encarar cuantiosas remodelaciones para hacer funcional el ala derecha del enorme predio. Una de las grandes ventajas es la fácil accesibilidad y, también, el espacioso frente que permite disponer de un espacio verde y lugar para estacionar.

Según contó a DIARIO DE CUYO el coordinador General de la Universidad Siglo XXI, Nicolás Valentino, la inauguración está prevista para el venidero 10 de mayo, lo que llevará a 4 las sedes de esa casa de altos estudios en la provincia.


‘Se hizo una inversión muy grande para dejar excelente el lugar, que creemos que tiene una ubicación privilegiada‘, explicó. Hoy la Siglo XXI tiene en la provincia unos 1.000 alumnos y se ha consolidado en la provincia ya con 10 años de permanencia.

La historia de la champagnera

La marca Duc de Saint Remy llegó en 1912 con el desembarco de las primeras partidas. Recién en 1941 salieron a la venta botellas producidas íntegramente en Argentina. La construcción de la bodega comenzó en 1950 con una capacidad de 3.000.000 de litros, y terminó en 1952.

Procedencia San Juan, el champagne que enorgulleció a los sanjuaninos

Hasta 1983, de San Juan partían sólo vinos básicos, comunes. Pero desde ese año empezó a elaborarse champagne desde la bodega de avenida Libertador pasando Santa María de Oro, en Rivadavia.

En los ’90, la bodega pasó por altibajos y pasó por distintos grupos empresarios, hasta el 2006 que lo tomó la firma que la llevaría hasta su desaparición. Hubo intentos por sacarla adelante inclusive con un relanzamiento de la marca en 2010, pero en el epílogo de ese año la bodega cerró definitivamente.

Una de las veces que se incendió la bodega

El predio fue mantenido durante algún tiempo, pero la desidia empezó a ganar terreno y el lugar se convirtió en refugio de linyeras, e incluso experimentó incendios