La pandemia por el covid-19 afectó a todos, pero a algunas familias las dejó directamente sin empleo. Fue el caso de Natalia Godoy y su marido, quienes, frente a ese panorama, decidieron aprovechar las habilidades de ella en el manejo de la cerámica y se pusieron a fabricar urnas para guardar las cenizas de personas fallecidas. Al punto que en la actualidad producen unas 200 por mes y las venden no sólo en San Juan sino también en otras provincias argentinas y hasta reciben pedidos por internet.

"Son casitas para almas, como les puso mi hija Guadalupe", contó Natalia. Y hoy se trata de un emprendimiento familiar en el que han tenido que contratar gente para que les ayude.

En plena pandemia, tanto su marido, que trabajaba en el comercio, y ella, que cumplía tareas en un centro de estética, se quedaron sin empleo y vino la propuesta de un amigo, que tenía una empresa fúnebre, de fabricar urnas en cerámica cuando recomendaban hacer cremaciones de las personas fallecidas por covid.

"Lo que había en el mercado eran cajoncitos de madera, muy tristes, y nuestro amigo sabía que yo trabajaba la cerámica, pero como un hobby, y me preguntó si me animaba a hacerlas en este material", contó la mujer.

Así nació Urnas Flor del Aire, un emprendimiento familiar que contó con la ayuda del Programa Mujeres Más, de la Agencia Calidad San Juan (ver aparte), que le permitió acceder a un crédito para adquirir el horno para fabricar las urnas.

"Fue una cosa muy fuerte al principio porque falleció el papá de un amigo y ahí empezamos con el proyecto", dijo Natalia. Incluso se enteraron que, en algunas provincias, entregaban las cenizas de personas fallecidas en bolsas. "Era algo muy feo y eso nos dio más fuerza para seguir adelante", relató.

Hacer una urna, que incluso algunos las adquieren para guardar las cenizas de una mascota, puede llevar hasta una semana de trabajo. La tarea empieza con arcilla que adquieren desde Córdoba o Mendoza y con la utilización de un horno eléctrico adquirido con el crédito del programa Mujeres Más.

Después de hacer el molde, el proceso lleva una primera cocción de unas 6 a 7 horas con temperaturas que rondan los 1.000 grados. Luego viene un esmaltado y de vuelta al horno.

La producción ronda las 200 urnas por mes, pero el proyecto es llegar a las 500 en un taller que Natalia tiene en su propia casa en Chimbas y donde no hay descanso.

Una urna para mascotas puede llegar a costar desde los $3.500 y para las cenizas de personas que han sido cremadas los valores parten desde los $5.000.

En la actualidad la fabricación de las urnas es el principal ingreso familiar porque no sólo las venden en San Juan sino que también tienen clientes de empresas fúnebres de Mendoza, Tucumán y Buenos Aires. Y también reciben pedidos por internet.

"Están hechas con el corazón y con mucho cariño porque se trata de algo muy especial para las familias", contó Natalia.

Hasta ahora son el único negocio dedicado a este rubro particular en el que, incluso, no sólo se sumó su esposo que había quedado desempleado, sino también los hijos de la pareja. Agostina de 16, Julián de 11 y Guadalupe de 7 años.

La tarea es tanta que hasta han tenido que contratar a tres chicas que los ayudan en el taller y con la idea de seguir creciendo en el emprendimiento familiar.

El programa Mujeres Más

Se trata de un programa destinado a las mujeres sanjuaninas que busca generar capacidades empresariales, brindando conocimientos y acompañamiento técnico-profesional, a fin de lograr su desarrollo personal y laboral, como así también el fortalecimiento de sus empresas a través de una mayor competitividad.

Cuenta con un proceso de tutorías (acompañamientos), mentorías, capacitaciones y financiamiento a través de créditos de hasta $400.000, con una tasa de interés del 19.9% anual, cuya garantía es un cheque de pago diferido, según dio a conocer Eduardo Danna, de la Agencia Calidad San Juan.

El plan está especialmente dirigido a mujeres emprendedoras que posean iniciativas para lograr su desarrollo personal y laboral, que tengan su propio emprendimiento, apostando a la generación de autoempleo.