Un nuevo llamado a licitación por el servicio de catering y aseo de la minera Josemaría, en Iglesia, fue el detonante otra vez de la queja de los proveedores iglesianos. Es porque desde la Cámara de Prestadores de Servicios Mineros de Iglesia (Capresmi) dijeron que una vez más quedaron afuera del llamado y que ni siquiera les habían avisado de la convocatoria. Frente a la situación, Fernando Varela, titular de la entidad, dijo que no descartan volver a las movilizaciones, como el año pasado.

Lo que reclaman ahora los proveedores iglesianos es lo mismo que vienen pidiendo desde, al menos, el año pasado. Y es que los directivos de Josemaría se reúnan con ellos y les comuniquen cuándo realizarán licitaciones para poder presentarse y ofrecer sus bienes y servicios.

En el marco del conflicto, poco antes del mediodía de ayer, hubo un encuentro en el Ministerio de Minería de representantes de la Capresmi con el ministro Carlos Astudillo. Pero no había ningún integrante de la minera. Allí se acordó que habrá una nueva reunión mañana, a partir de las 10.30, en la sede de la cartera minera. "Es que nos siguen ninguneando y no nos enteramos de lo que pasa", dijo Varela, visiblemente molesto, a la salida del encuentro.

El dirigente sostuvo que cuando se enteraron del llamado, y que el jueves de la semana pasada se había cerrado la recepción de ofertas, pidieron que se postergara la definición de la licitación. E incluso mandaron tres mails, con copia al ministro, alertando de la situación. En el último mensaje le comunicaron a la minera que "vuestro silencio hace suponer que nuestras inquietudes les son totalmente indiferentes. Lo que siempre nos enorgullece en la historia de esta cámara son los sólidos códigos de respeto a la palabra, acuerdos firmados y la tenacidad de nuestras convicciones".

Varela explicó que "los proveedores iglesianos podemos aportar frutas, verduras, pan, fideos, pollos, pero nadie nos avisó y otra vez nos dejan afuera".

Sobre el planteo de los proveedores iglesianos, de tener más participación en las licitaciones, la compañía no dio respuestas. Sólo comunicaron que "recibimos de manera positiva la convocatoria del ministro, ya que nos permitirá, al igual que lo venimos realizando en las reuniones con las cámaras de Iglesia, repasar nuevamente la metodología de las 'submesas de trabajo'".

No es la primera vez que los proveedores mineros se quejan de que no tienen participación suficiente en los contratos de obras y servicios que está llevando Josemaría, la futura mina de cobre, oro y plata más grande que tendrá la provincia. Incluso en septiembre del año pasado hubo una protesta frente a las oficinas de La Cobriza, que la minera tiene en Rodeo, Iglesia. Fue llevada adelante por la cámara de Varela, que nuclea a unos 70 proveedores iglesianos de diversos rubros. La manifestación tuvo lugar justo cuando en el interior se estaba desarrollando un encuentro con otros proveedores, que la compañía organiza en forma periódica.

En el mail a Josemaría, desde la Capresmi expresaron que "no nos empujen a escalar conflictos que nadie quiere, que pueden atentar contra el buen desenvolvimiento de la minería en el departamento y afecten la licencia social que al sector minero tanto le costó conseguir y que estamos interesados que esto siga así".

Mientras tanto, los meses corren y los proveedores se empiezan a poner nerviosos porque tampoco conocen los planes y las demandas a futuro, como para prepararse.

Duración
19 
 Es la cantidad de años de vida útil que se contempla para el proyecto, según dio a conocer la empresa en el estudio de factibilidad realizado en el 2020. Se anticipa sacar 130.000 toneladas métricas de mineral por año.

> Algunos datos de interés del proyecto

Josemaría es un yacimiento de cobre, oro y plata ubicado en el extremo noroeste de la provincia de San Juan, en el departamento de Iglesia. Está localizado a 475 km de la Ciudad de San Juan y a 10 km del límite con Chile. El proyecto propone un minado convencional a cielo abierto y procesamiento del mineral mediante trituración y molienda, flotación y filtración del concentrado, de manera económicamente viable y responsable con el cuidado de las personas, el ambiente y las comunidades anfitrionas, dice la empresa en un comunicado oficial.

En marzo de 2021, Josemaría presentó su Informe de Impacto Ambiental para la explotación ante la autoridad minera de la Provincia de San Juan, la cual otorgó la Declaración de Impacto Ambiental en abril de 2022. A partir de ahí, el proyecto viene avanzando en el proceso de tramitación de los permisos sectoriales, la actualización del cronograma y costos del proyecto y con los acuerdos comerciales con autoridades provinciales y nacionales. Pero todavía no hay fecha del inicio de la construcción.