Un mes después de quedar seriamente complicado como principal y único sospechoso de haber dado muerte en un ajuste de cuentas a un vecino con el que había tenido problemas, Eduardo Sixto ‘Gitano’ Carrizo (44) decidió asumir su responsabilidad en ese crimen (lo mató de un tiro en el ojo) y este viernes se mostrará dispuesto a ratificar su autoría en ese delito y aceptará la pena acordada a través de su defensor, Jorge Videla, con el fiscal Nicolás Schiattino y sus ayudantes fiscales, Ignacio Domínguez y Roxana Fernández (UFI de Delitos Especiales): 11 años de cárcel por homicidio agravado por el uso de un arma de fuego, algo que eleva la escala de los castigos (el mínimo es de 10 años y 8 meses), dijeron fuentes judiciales.
Para los pesquisas no es clara todavía cuál fue la secuencia de rencillas y otros cruces entre Carrizo, su pareja y la familia de la mujer con la víctima, Jorge Antonio ‘Mudo’ Romero (24) y sus parientes.
Sí les quedó constancia de los cuatro momentos previos al cruce letal, ocurridos entre la 1,30 de la madrugada y las 14,30 del pasado miércoles 5 de marzo, entre las Villas del Sur y El Milagro, en Chimbas. El primer cruce, inicialmente involucró a otros protagonistas, porque fue un hijo de la pareja del ‘Gitano’ (un menor) el que resultó golpeado por Romero, algo que ofuscó a la madre del chico, que fue a insultar e intentar golpear con un machete al ‘Mudo’, indicaron.
Luego de esos dos episodios, el propio Carrizo apareció en escena, pues los testigos mencionan que atacó a golpes a un primo de Romero, también en la madrugada.
Horas después, Romero supo que habían golpeado a su primo y entonces enfiló hacia la casa de Carrizo y su pareja, atacándolos a pedradas. Esas piedras -dijeron- provocaron daños en la camioneta de un fletero que descargaba leña en la casa de la pareja agredida, e incluso se habla de que la mujer fue golpeada en la espalda cuando buscaba refugiarse.
Ese episodio fue el último para Romero, porque Carrizo salió a buscarlo con una pistola y cuando lo encontró, en el cruce de la prolongación Chacabuco y Prolongación 1 de Julio, límite entre las Villa Juan XXIII y del Sur, en Chimbas, hubo un enésimo cruce de palabras hasta que efectuó varios disparos contra su rival, uno de los cuales penetró por su ojo derecho y lo sentenció.
Alrededor de las 14,30 de aquel día, Carrizo huía a los tiros (en el lugar hallaron cuatro vainas servidas calibre 22) en la moto que guiaba su hijo. Se entregó en Tribunales al otro día, junto a su abogado. Ahora, admitirá su descontrolada reacción y asumirá su culpa.

