La devoción de los sanjuaninos se hizo sentir desde la previa. Hicieron palmas y bailaron cuando interpretaron los cánticos religioso, esperando la llegada del patrono de la provincia. Fue anoche durante la celebración del día de San Juan Bautista donde volvió a hacerse la tradicional gran fogata que, hace varios años dejó de hacerse por falta de espacio. Cabe recordar que desde hace un par de años esta festividad incluía en encendido de pequeñas hogueras frente a la Catedral. Pero con la misma devoción de la gente. Más de 2.000 personas participaron del encendido del fuego que se realizó en un terreno frente al CIC del Barrio Manantiales, en Capital.
Las bocinas de los vehículos anunciaron la llegada de la imagen de San Juan Bautista, en caravana desde la Iglesia Catedral donde previamente se celebró una misa en su honor. Y en ese instante resurgió con mayor intensidad la devoción de los presentes que levantaron sus pañuelos, aplaudieron y gritaron ‘¡Viva San Juan Bautista!’ para darle la bienvenido.
Y ese entusiasmo se mantuvo desde que Andrés Riveros, sacerdote de la Catedral, diera la orden de encender el ‘fuego sanador’. Nuevamente, la gente aplaudió y gritó el nombre del Santo.
Pero, después de este momento emotivo y a medida que las llamas ganaban altura, los devotos hicieron silencio. Hasta los niños. Fue cuando el padre Andrés dijo que todos pidieran bendiciones y que expresaron en su interior las intenciones sobre qué pedían que se quemara en este fuego.
El silencio de los presentes se prolongó por varios minutos y, más de uno, se emocionó. Luego volvió el entusiasmo. Fue cuando todos, con fe y devoción rezaron el Padre Nuestro.