De los dos llegaba más entero como equipo Independiente, pero Boca es Boca y como local alimentaba sus chances. Al final se dio la lógica, el que juega mejor ganó y lo hizo con autoridad. Se bancó un primer tiempo en el que Boca salió mejor parado y generó más opciones que el “Rojo”. Corrigió en el segundo tiempo y con un gol de otro partido, logrado por Ángulo, pasó merecidamente Independiente.
Boca mostró su actitud de entrada, a los 4 minutos, Rey le tapó un disparo muy centrado a Merentiel, quien luego por dinámica y actitud fue el mejor jugador de la primera etapa.
Los dos se esmeraron en las coberturas defensivas por lo que era complicado penetrar los vallados que se erigían a medida que el rival avanzaba.
El sanjuanino Matías Giménez, tuvo la más clara para el “Rojo”, cuando le quedó una pelota y no pudo sacar el remate, porque Marchesín barrió con todo su cuerpo y evitó el gol.
Fue Boca el que estuvo más cerca sobre el final. Primero, a los 37 minutos, Rey le sacó un mano a mano a Merentiel, Dos minutos después, una corajeada de Merentiel por la derecha, culminó con un centro a ras de piso, que de manera increíble, con todo el arco a su favor, el chileno Palacios tiró afuera.
En la segunda parte, Independiente tuvo una actitud más decidida. Abrió la cancha e hizo circular la pelota con mayor convicción y del triángulo Montiel – Cabral – Loyola nacía un fútbol más lúcido, que en el primer tiempo.
Boca respondió con pelotazos largos con la idea de aprovechar espacios a espaldas los defensores “Rojos”, pero Vera y Lomónaco respondían con una firme elegancia.
Herrón mandó a la cancha a Cavani y el español Ander Herrera, para oxigenar y equilibrar las acciones. Seis minutos después en una jugada personal espectacular, el colombiano Ángulo, anticipó a Merentiel, ingresó al área y eliminó a Costa, para luego, con un remate alto y cruzado, someter a Marchesín.
Hace 23 años que Independiente no gana un título local. En semifinales jugará con Huracán en Avellaneda.
De ahí en más Boca fue todo ganas con desesperación, e Independiente manejó los tiempos y espacios con una serenidad asombrosa dentro de esa caldera que es La Bombonera.
Sobre el final jugado por jugado Marchesín subió dos veces a buscar en un córner una oportunidad que sus compañeros no supieron, porque fueron superados en todos los aspectos del fútbol, por un equipo serio y convencido de lo que pretendía. Independiente pudo haber aumentado en un par de contras, incluso Galdamez anotó con el arco vació pero lo cobraron un offside inexistente.