El Instituto Cervantes, la institución especializada en la enseñanza del idioma español en el mundo, ha dado a conocer el informe anual de la evolución de nuestra lengua y ha revelado el crecimiento sostenido de la población hispana parlante, incluyendo a 500.000 nuevos estudiantes a pesar del estancamiento de todas las actividades como consecuencia de la pandemia. Se suman cinco millones de nuevos hablantes de manera que 7,5% de la población mundial emplea nuestro idioma, ubicándose en segundo lugar después del inglés al haber superado al francés en la vieja competencia.


Estos datos corresponden a la situación previa a la propagación del coronavirus por lo tanto el amesetamiento cultural y educativo ha influido en números que podrían ser mayores. No obstante las cifras confirman que el español mantiene su crecimiento demográfico, de manera que las proyecciones apuntan hasta 2050, cuando 756 millones de personas hablarán español, tras lo cual se llegará al estancamiento poblacional del mundo hispanohablante, según la entidad que realiza este seguimiento y sus estimaciones futuras.


Pero si se quiere un idioma más influyente no se puede pensar en que la demografía sea un factor suficiente. Por eso es importante el crecimiento del español en Internet, donde es el segundo idioma más empleado en el mundo, y se mantiene estable como valor económico, por lo que los países donde el español es el idioma oficial generan casi el 7% del PBI mundial. Además se consolida su ventaja sobre el alemán y el francés en el mercado de la enseñanza como idioma extranjero, detrás del inglés, y en el ámbito diplomático supera al francés, de acuerdo a un informe de las Naciones Unidas.


De todas maneras la lengua dominante en el mundo sigue siendo el inglés con 1.100 millones de usuarios, seguido por el chino con 853 millones de usuarios en el idioma oficial ya que en el gigante asiático existen numerosas lenguas regionales, prevaleciendo el mandarín en las comunicaciones internacionales. La globalización y en particular el comercio internacional, pone sobre la mesa de las negociaciones el idioma que tiende a ser universal como es el caso del inglés en el mundo de los negocios.


Por eso todos los estudios lingüísticos ponen la mirada en Estados Unidos y las expectativas indican que en 2060 será el segundo país hispanohablante del mundo, después de México, estimándose que casi uno de cada tres habitantes estadounidenses será hispano.