La escena fue captada por una cámara de seguridad en la que se ve como la madre adolescente entra en un ascensor con varios bultos. Tras salir por la puerta, se comprueba como la joven se acerca a una habitación llena de basura y deja uno de los bultos. Fue posteriormente cuando una limpiadora descubrió al bebé, que aún permanecía vivo.

La limpiadora, en declaraciones que recoge el Southern Metropolis Daily, aseguró que pensó "que era una muñeca cuando vi la pierna del bebé. Pero entonces volví a mirar y vi que era un bebé y que estaba vivo. Había sangre en su cara y en su cuerpo”. Según ha informado el mismo medio, tras deshacerse del bebé, la joven madre fue a trabajar a un salón de belleza como hacía habitualmente.