Cuando los espectadores se acomoden en sus butacas, a mediados de agosto (ver aparte), estarán listos para disfrutar una propuesta artística que tiene aristas para destacar: Por un lado, está a cargo de un elenco totalmente sanjuanino, el Ballet San Juan Nuestro Tiempo que, creado hace más de tres décadas bajo el ala de la comuna capitalina, comanda Gerardo Lecich. Por otra parte, las dos obras que subirán a escena proponen un viaje desde la danza contemporánea hasta el folclore y el tango del 1900, contando distintas historias a través de diferentes lenguajes. Y en el medio, un homenaje a Juan Carlos Abraham y Violeta Pérez Lobos, pioneros de la danza contemporánea en la provincia, con la exhibición de un video "para que las nuevas generaciones los reconozcan sin olvidar su gran aporte a nuestra cultura", señalaron desde la organización del espectáculo.


Producción integral del Teatro Sarmiento, con el auspicio de Turismo y Cultura provincial, 30 bailarines en escena -con Natalia Luna y Javier Riveros como figuras invitadas- pondrán cuerpo y alma a Los inmigrantes de ningún lugar e Historias del 900, dos cuadros argumentales creados ya hace tiempo y que el director del ballet decidió reponer, en el primer caso bajo la atenta mirada de su creador, Sergio Molini (discípulo de Abraham radicado en Bruselas); y en el segundo, de puño y letra, renovando desde la música hasta el vestuario. 


Los Inmigrantes de ningún lugar es una fusión de danza contemporánea y tango. Fue creado por Molini a modo de homenaje a Abraham en el año 2000, con una banda sonora que incluye a Piazzolla y "aborda la búsqueda introspectiva de la esencia de la vida frente al desarraigo, las ausencias vitales y los valores establecidos", apuntaron. 


"Se han cumplido 35 años de la muerte de Juan Carlos y en el ballet tenemos a su hija y a su nieto (NdeR: Marian Abraham y Gerardo Lecich Abraham), así que me pareció oportuno revivir este cuadro. Hablamos con Molini y le pareció excelente. Somos un ballet que hace folclore y más tango, y esto de atrevernos al contemporáneo es porque hemos tenido su mirada desde Bélgica. Él nos corrige vía internet y así estamos trabajando, de manera intensa hace un par de meses", apuntó el director.

Imágenes de Los inmigrantes de ningún lugar, de Molini, danza contemporánea (izq); y de Historias del 900, viajado cuadro que regresará renovado.


Historias del 900, creado por Lecich, se estrenó en 2013, llegó a Cosquín y recorrió distintos países con excelentes críticas, como Italia -donde fue premiado- , Chile y Siria. Con audios originales y vestuario de época, "recrea una historia ocurrida en San Juan en 1904", rescatando costumbres de antaño y con el humor como guiño cómplice. 


"Es una obra que nos ha dado muchas satisfacciones y que hace muchos años que no hacemos, la última vez fue en 2003. Lo estrenamos en 1993 en el viejo Centro Cultural Municipal (Cecum, en Concepción), hicimos una versión mejorada cuando lo llevamos a Italia y ahora lo volvimos a mejorar: algunas partes de la coreo han cambiado, he conseguido imágenes originales y música increíble, grabaciones viejas rescatadas digitalmente; y el vestuario es nuevo", detalló Lecich, quien comentó que en el elenco solo quedan 3 de bailarines de los que fueron parte de aquel debut. 

"Es un cuadro muy divertido que habla de cosas de San Juan, reales y posibles, en las que he investigado bastante. Por ejemplo hablo de un cabaret que estaba hacia el lado de Trinidad, que se llamaba El gato blanco; y también hay alusiones a personajes que existieron en la época, sin nombrarlos, como un inmigrante italiano que tenía bodega, una costurera famosa, un boxeador... Y los tangos que usamos son de esos años", agregó. "Era una época muy pintoresca, la gente no había vivido ninguna de las guerras mundiales, la belle epoque donde parecía que el mundo iba a ser de alegría...", se explayó el creador, que también busca sacarle una sonrisa al público. 

Las dos propuestas hablan, además, del crecimiento y la versatilidad que va experimentando el ballet, que en ambos casos, pero sobre todo con Historias del 900, saca a relucir su histrionismo; de hecho las incluyen bajo el espectro de la danza-teatro. 


"Son dos cuadros muy distintos y muy difíciles, pero estamos trabajando muchísimo y con un gran entusiasmo, voluntad y buena onda. Eso es hermoso y es lo que -tras dos años parados por la pandemia, donde el ballet sufrió muchísimo- también necesitábamos que nos pase, volver a sentir que estamos vivos", valoró Lecich cara al reestreno. 

 DATO

Apto para todo público, el espectáculo del Ballet San Juan Nuestro Tiempo se verá los días sábado 13 y domingo 14 de agosto en el Teatro Sarmiento, a las 21.30 hs. Entrada $400.