Fotos Maxi Huyema 

El Nano Rodríguez y el Diablito Martines. Hoy cada uno encabezará su propia peña, pero ya están planeando una juntos, para el mes próximo.


Para los amantes de las peñas -que a juzgar por la venta anticipada de entradas, son muchos en San Juan- esta noche será especial. Ni qué decir para sus protagonistas, que como la mayoría de los artistas padeció largo tiempo, desde lo económico y lo anímico, la falta de espectáculos a raíz de la pandemia. Es que este será un viernes bien peñero si los hay, con dos de sus actuales exponentes recuperando ese ritual telúrico con toda la carne en el asador... o la música en las tablas y, aclararon, acorde a los protocolos. Por un lado, el Nano Rodríguez; por otro, el Diablito Martines. Ambos habían hecho ya un par de shows este año, pero aseguran que no tan potentes como los de esta noche. Reunidos por DIARIO DE CUYO, confesaron que no repararon en la simultaneidad de sus propuestas, sin embargo están felices de cómo se viene moviendo la taquilla para cada uno. Y por eso, una y otra vez, expresaron sincero agradecimiento al público, "que apoya al folclore y a los artistas locales" y que "permite que todos tengamos trabajo", como dijo la dupla sobre esta coincidencia que, lejos de entablar cualquier tipo de competencia, se transformó en alianza y ahora ambos ajustan detalles para concretar una peña juntos, que podría ser en noviembre próximo antes de las elecciones. "Esta nota nos ha unido más todavía", afirmó Rodríguez, ya "craneando" la juntada a la que invitarán a otros "compadres". Pero primero lo primero: este regreso que los ocupa y anima.


"En las promos hacemos hincapié en que estamos de vuelta porque, aunque nunca dejamos de trabajar ni de ensayar con los músicos, es estar de vuelta en los escenarios, que para nosotros es volver a respirar, a vivir", expresó conmovido Nano, quien contó que a nivel económico está prácticamente empezando de cero, ya que durante el aislamiento debió vender instrumentos y movilidades. Incluso el disco Amor Callado, que con artistas invitados estaba listo "para romperla", tuvo que quedar en stand by hasta que mejore su situación. "Estaba cayendo en una depresión, amargado porque trabajé toda mi vida para armar toda mi estructura y de repente se vino todo abajo... Esto es mi vida, estoy cumpliendo 25 años de laburo ininterrumpidos, yo dejé todo para ser cantor... Igual tengo mucha fe en Dios y creo que esto del covid, que también tuve, fue un llamado de atención muy grande que Él nos hizo a todos. Ahora tenemos esta oportunidad de volver a empezar, pero para no equivocarnos, sabiendo dónde están las prioridades", se explayó el artista festivalero, que ya compartió escena con Canto Cuatro y a quien lo esperan otros cruces musicales con Los guaraníes y con Las Valijas. Para el Diablito las cosas no son tan distintas. "Una peña peña, así como la que vamos a hacer ahora, desde antes de la pandemia que no hago. Ha sido muy complicado para los que vivimos de esto, hemos estado muy azotados. Que se hayan abierto estas puertas es un respiro para todos, no sólo para nosotros, sino también para el iluminador, para el que pone el sonido, el que alquila las sillas, el que hace la comida... Hay un montón de gente laburando atrás para que esto salga de la mejor manera y es muy bueno que todos podamos trabajar, porque además es toda gente de acá, de San Juan. Será una sanjuaninidad al palo", sonrió Martines, a quien luego lo espera una agenda cargada por distintas provincias, también como músico de bailarines -"con los que tengo un romance", pintó su vínculo- que lo mantendrá un buen tiempo fuera de la provincia. 


Con sus carreras moviéndose otra vez, los dos disfrutan de toda esta previa que desembocará en sendas peñas, suerte de minifestivales donde se canta y baila, que para ambos están colmados de "magia". 


"La peñas tienen esa cosa de estar todos en contacto, los cantores, los músicos, los bailarines, el público... es un plus hermoso", dijo el Diablito, quien ha representado a la provincia como solista de canto en Laborde y Cosquín. "En la peña te encontrás con gente que sólo ves ahí; y además no tiene ningún tipo de discriminación ni prejuicio, ni de cómo cantás, ni si tenés o no plata o cómo vas vestido; y eso también es importante, porque lo único que importa es disfrutar del folclore. La peña es sólo ir y disfrutar. La gente llega a ese lugar místico y es como que se olvida de todo, de eso se trata", describió. "La magia que emana una peña es única. Yo siempre digo que es por los duendes peñeros que uno evoca cuando está cantando y hacen que pasen cosas lindas ahí", aportó en la misma línea Nano, para quien "no ha sido lo mismo el streaming, ni la televisión, ni la radio. El estar en la peña, cante el que cante, es una mística, una esencia que para el peñero es vida, es impresionante lo que se siente compartiendo con amigos y colegas". "Yo durante toda la pandemia me la pasé cantándole a un teléfono, así que esto para mí es genial y creo que para el público será lo mismo", se rió el Diablito.


Ávidos del cara a cara y del aplauso cálido en vivo y en directo. Así están dos de los jóvenes peñeros de San Juan. Como bien resumen, "a flor de piel". 

  • La peña del Nano. Hoy a las 22 hs en Sala del Sol de Luna Morena (Avenida Rawson 1358 sur). Reservas al 2644423344. Artistas invitados Los cumpas (humor), Alexa, Manu Olivera y el Ballet Emblema de mi tierra. 
  • La peña del Diablito. Hoy a las 22 hs en Posta Chacrita (Ruta 20 Km 11). Reservas al 2644136560 y 2644622866. Artistas invitados Los Videla, Giselle Aldeco y El siete cincuenta. Conducción Javier Recabarren.