"No queríamos quedarnos cruzados de manos esperando que todo pasara sin poder aportar algo de lo que hacemos" aseguró Dalmiro Buigues sobre el proyecto colaborativo que lanzaron desde su estudio Buda.TV a diseñadores, artistas e ilustradores para unir a las personas, cambiar el ánimo y visibilizar de manera artística lo que fue uno de los movimientos colectivos más fuertes en las grandes capitales durante la pandemia: los aplausos en los balcones para apoyar al personal médico. 

Buigues es sanjuanino, tiene 35 años y hace 13 años se marchó a Buenos Aires a trabajar y desde hace un tiempo triunfa como director creativo y arte de su propio estudio, donde es socio de otro talentoso diseñador, Martín Dasnoy. Juntos se unieron a Motion Appétit, encabezado por el francés Gabriel Murge, para lanzar este proyecto internacional que llamaron Stay home, Stay positive y está disponible a través de Instagram, aprovechando la estructura de esa red social, que permite postear tres post en horizontal, los balcones parecerían formar un piso y así construyeron este edificio animado.

"Esperábamos lograr unos 60 pisos, era una locura para nosotros y conseguimos 172 pisos" comentó Buigues sobre el trabajo que significó que recibieran 516 animaciones (entre el que está el de otro sanjuanino, Francisco Godoy) llegados de 69 lugares tan disímiles como los principales países europeos, importantes naciones árabes, Rusia, China y del sudeste asiático, decenas de países latinoamericanos, Estados Unidos y hasta los remotos Kazajiztán, Macedonia o Ucrania. La participación de mujeres fue de más del 30%, un dato significativo teniendo en cuenta que la industria de la animación a nivel mundial ha sido un ámbito predominantemente masculino, aportaron desde el estudio.

La temática era libre, sólo había una premisa ineludible: ser positivos y aplaudir en algún momento de la animación. El resultado es un creativo crisol de personajes y colores para transmitir ese sentimiento común que todavía continúa atravesando a las comunidades golpeadas por el coronavirus.

Buigues comenzó aprendiendo animación de manera autodidacta en San Juan; se inscribió en la carrera de Diseño gráfico de la UNSJ porque era lo más parecido a lo que le gustaba y aún como estudiantes armó con otros compañeros el estudio Mañas; el diseñador destaca entre los logros más recientes de Buda.tv la buena repercusión del corto Mate, nominado a los premios Quirino de la animación iberoamericana, publicidades con importantes firmas nacionales y extranjeras; y haber sido los creadores de Tere, la niña del espectáculo Evolución de la Fiesta Nacional del Sol de este año. "Trabajar para la Fiesta del Sol era como una materia pendiente, era un proyecto donde no había trabajado nunca en San Juan, cuando ya había trabajado para grandes firmas. Fue una buena experiencia", dice el profesional que antes de tener su propio estudio realizó trabajos para canales como Cartoon Network, Discovery Kids, Fashion TV entre otros. 

"Hemos sacado una sonrisa"

-Como sanjuanino, ¿de qué manera viviste la respuesta a esta convocatoria? 

-Creo que básicamente no importa dónde estemos, quedó demostrado tanto con el virus como con la posibilidad de trabajar para cualquier parte del mundo y cualquier artista del mundo. No importa dónde estés sino realmente lo que tengas para decir y lo que quieras comunicar. Hoy Internet te abre puertas a todo el mundo. Tenemos suerte de, por ejemplo, tener proyectos con una gente de Japón... Ahora más que nunca creemos que estamos todos en la misma. Es muy fácil llegar a cualquier lugar del planeta Tierra si tu idea es potente, es positiva y puede generar algo bueno en el mundo; con la herramientas que uno tiene, en nuestro caso el diseño y la animación, generar algo que pueda devolver un poco de buena onda a la situación.

-¿Sentís que hicieron un aporte?

-Creemos que hemos logrado algo, al menos le hemos sacamos una sonrisa a alguien.

-¿Qué es la animación para vos?

-Además de un trabajo, es una pasión; tengo la suerte de poder trabajar en algo que me gusta y a su vez que me traiga mucho rédito tanto emocional como económico.

El anfitrión del edificio 

No tiene nombre, pero es el protagonista de la animación (foto) con la que Buda.tv abrió la convocatoria de Stay home, stay positive. Se trata de un personaje inspirado en un títere de un pequeño teatro, muy expresivo y divertido, que por momentos es capaz de girar toda su cabeza por ansiedad y miedo. Pero que en el fondo es muy positivo y optimista, por eso arenga para que los demás se sumen a su forma de pensar. Es el el que arranca la fiesta en el edificio cuando pone la música para que todos se sumen al ritmo. Está presente en las dos animaciones que presentaron para esta iniciativa global, primero en la que anuncia el proyecto y luego como parte de este edificio positivo y dispuesto a aplaudir para apoyar a los que trabajan en plena pandemia.