No solo fue un símbolo de libertad, belleza y talento, fue también una actriz de renombre que marcó profundamente la historia del cine europeo y mundial. Claudia Cardinale, quien falleció ayer a los 87 años en Francia, dejó un invaluable legado de películas en las que plasmó su inconfundible sello. Historias que marcaron una época y que, especialmente en los ’60, la posicionaron como figura clave del cine de posguerra y musa de los más grandes directores: los italianos Luchino Visconti y Federico Fellini, los franceses Henri Verneuil y Philippe de Broca, los norteamericanos Blake Edwards y Richard Brooks y el alemán Werner Herzog, por citar algunos.
León de Oro en Venecia (1993), Oso de Oro en Berlín (2002) y Legión de Honor francesa (2008), entre otros galardones, aquí va un arbitrario seleccionado de cinco films de la intérprete tunecina, al menos cinco de entre más de 130 que rodó, que no hay que dejar de ver y que son un reflejo de una época muy particular del séptimo arte.

Rufufú (1958)
De Nanni Loy. Con Claudia Cardinale, Vittorio Gasman, Nino Manfredi.
Comedia. Un milanés convence a Pepe y a sus amigos para que se trasladen de Roma a Milán para dar un golpe muy fácil y provechoso: robar el furgón que transporta el dinero de las quinielas. Pero, al llegar a la capital lombarda, se encuentran solos porque el que planeó el golpe ha sido arrestado. Con todo, deciden seguir adelante y, a pesar de no respetar el plan establecido, consiguen su objetivo.

Rocco y sus hermanos (1960)
De Luchino Visconti. Con Claudia Cardinale, Alain Delón, Renato Salvatori.
Drama. Rosaria y sus cuatro hijos (Simone, Rocco, Ciro y Luca) abandonan su tierra natal, Lucania (la actual Basilicata), para emigrar a Milán en busca de trabajo y oportunidades que les permitan mejorar sus condiciones de vida. Allí encuentran a Vincenzo, el hermano mayor, que trabaja de albañil pero que está relacionado con el mundo del boxeo.

Ocho y medio (1963)
De Federico Fellini. Con Claudia Cardinale, Marcello Mastroianni, Anouk Aimée.
Comedia dramática. Después de obtener un éxito rotundo, un director de cine atraviesa una crisis de creatividad e intenta inútilmente hacer una nueva película. En esta situación, empieza a pasar revista a los hechos más importantes de su vida y a recordar a todas las mujeres a las que ha amado.

El gatopardo (1963)
De Luchino Visctonti. Con Claudia Cardinale, Burt Lancaster, Alain Delón.
Drama histórico. Es la época de la unificación de Italia en torno al Piamonte, cuyo artífice fue Cavour. La acción se desarrolla en Palermo y los protagonistas son Don Fabrizio, Príncipe de Salina (Burt Lancaster), y su familia, cuya vida se ve alterada tras la invasión de Sicilia por las tropas de Garibaldi (1860). Para alejarse de los disturbios, la familia se refugia en la casa de campo que posee en Donnafugata en compañía del joven Tancredi (Alain Delon), sobrino predilecto de Don Fabrizio y simpatizante del movimiento liberal de unificación.

Hasta que llegó su hora (1968)
De Sergio Leone. Con Claudia Cardinale, Henry Fonda, Charles Bronson.
Western. Brett McBain, un granjero viudo de origen irlandés, vive con sus hijos en una zona pobre y desértica del Oeste americano. Ha preparado una fiesta de bienvenida para Jill, su futura esposa, que viene desde Nueva Orleáns. Pero cuando Jill llega se encuentra con que una banda de pistoleros los ha asesinado a todos.
Y hay yapa: La Pantera Rosa (1963)

Aunque también es del tandem de los inolvidables ’60, es imposible no agregar este film dirigido por Blake Edwards, puesto que fue el debut de Cardinale en “La Meca” y la película que la lanzó como estrella internacional en Hollywood.
Comedia de enredos, el torpe Inspector Jacques Clouseau intenta resolver el robo de un valioso diamante conocido como La Pantera Rosa, famoso por su distintiva figura de una pantera en su interior. Cardinale aporta glamour y misterio al papel de la princesa Dala, propietaria de la joya y a la vez sospechosa, convirtiéndose en el centro de atención en una trama que mezcla crimen, romance y humor.
(Fuente: Film Affinity)
¿De qué murió Cardinale?
Inspiradora como mujer y como artista, Claudia Cardinale falleció el martes 23 de septiembre en su casa de Nemours, cerca de París, acompañada por sus hijos. No se ha revelado públicamente la causa específica de su muerte. Su representante, Laurent Savry fue quien confirmó el deceso y solo destacó que la actriz “se despidió en paz”. Hasta el momento, tampoco se ha informado públicamente ni la fecha ni el lugar del funeral, aunque trascendió que sería en París.
Su partida generó una ola de homenajes y repercusiones en todo el mundo, que coronan una era dorada del cine europeo.

