Osado y rupturista (como su rigor artístico). Imprevisible y aventurero (como su coqueteo surrealista y su dramaturgia visceral). Así es -si caben las aproximaciones- José María Muscari. No en vano su galaxia emocional tiene mil historias que contar (lo hace en mundomuscari.blogspot.com) y no en vano su sexualidad desconoce los prejuicios -gay asumido y "con total naturalidad"-.

"La transgresión en mí tiene que ver con la creatividad", explicará el niño mimado del "off" y el "on" que pendula entre el teatro under, el circuito comercial y la frivolidad de la tele. "Pero con la misma esencia", asegurará. Así aterrizará en la pista de Bailando 2011, donde bailará con un hombre. Antes, dialogó con DIARIO DE CUYO.

- Vas a protagonizar la primera pareja gay del Bailando ¿Cómo surgió la idea?

- En realidad, surgió como una propuesta de parte de Tinelli porque le interesaba que me sume al programa. Pero cuando me llamaron yo les hice una contraoferta y les propuse bailar con un hombre. Y tanto a Marcelo como a los productores les gustó. A principios del año pasado estuve trabajando para Ideas del Sur, en Sábado Show y ahora vamos a ver qué pasa a partir de abril en el Bailando. Voy a intentar divertirme, que me parece un poco que es el lema del programa. La televisión es un entretenimiento y siempre lo entendí como tal.

- ¿Y lo de elegir un partenaire masculino se entiende como provocación?

- En realidad no lo vivo como una provocación. Ni participar del Bailando ni bailar con un hombre. En ese sentido trato de darle la mayor naturalidad posible. Yo soy un gay totalmente asumido, que siempre tuve un lugar destacado dentro del trabajo y el mundo del espectáculo por mi desempeño como creador, como autor, actor y director. Mi sexualidad nunca fue algo fundante en el medio. En ese sentido, creo que el Bailando es un prueba de fuego para poder ser muy auténtico y para jugar en un show con el nivel de exposición que tiene.

- Mucho, por eso la noticia causó revuelo...

- Si, generó polvareda porque se sale del canon establecido del programa. No es un dato menor, pero creo que la transgresión en mí tiene que ver con la creatividad. Cuando propuse bailar con un hombre, lo pensé desde un lugar creativo, no desde la polémica. Está bueno porque trae un montón de complejidad, por que en general los bailes están pensados en un hombre y una mujer y requiere de un nivel de creatividad enorme del coach y del bailarín que va a estar conmigo. Y también obliga al programa y al jurado a correrse de su lugar establecido para juzgar. Hay dos hombres y ninguno de los dos hombres ocupa el lugar de la mujer y ese es el gran desafío...

- ¿Sentís que vas abrir cabezas?

- A ver... no me siento, de alguna manera, tan importante como para presuponer que con que yo baile en Showmatch pueda abrir cabezas. Sí creo que marca una diferencia y marcar una diferencia en la televisión de hoy en día no es un dato menor. Es una novedad que se suma y yo también, porque soy un personaje poco clasificable.

- Queda claro. Rompés esquemas todo el tiempo...

-Mirá, me parece que está bueno que en una industria como la televisión haya todo tipo de colores. Y creo que mi color o la forma en que llevo adelante con total naturalidad mi sexualidad y mi lugar en el mundo, le va aportar algo bueno a la televisión de hoy en día. Sin ningún tipo de ironías ni de humor alrededor de la sexualidad. Además, creo que después del matrimonio igualitario, el DNI a Florencia de la V, etc, etc., me parece que esto genera el mismo condimento que ya trascendió todo lo social y que ahora llega a un programa de tv.

- ¿Por qué pensás que te convocaron?

- Si hay algo que a mí me contenta de la convocatoria es que ellos me llamaron por les interesa quien soy yo en el mundo del espectáculo. Y mi lugar en el mundo del espectáculo lo definieron mis espectáculos. No mi desempeño mediático ni ninguna pelea ni nada relacionado a todo eso, que a veces se asocia a la televisión.

- ¿Te modifica en algo la explosión Muscari? ¿Te cambió la mediatización?

- No, en esencia sigo siendo el mismo. La diferencia tiene que ver con la el afuera, con la mirada del otro. Por ejemplo, ahora que hago temporada en Mar del Plata (NdR: participa en la obra "Cómo tener sexo toda tu vida con la misma persona" y se prepara para debutar en febrero con "Pirañas") la gente me reconoce, me saca fotos y me pide autógrafos. Todavía me sigue sorprendiendo que suceda esa especie de "empatización" que tiene con uno porque uno simplemente aparece en la caja boba. En ese sentido estoy muy tranquilo. Al público le gusta mi sensatez y me lo hace notar.

- ¿Te intranquliza el jurado? Dicen que se viene más bravo que nunca...

- A ver...no me planteo eso. Mi imaginario a participar del programa es mucho más ingenuo. Y tiene que ver con pasarla bien y mostrarme tal cual soy. Y eso en la tele, donde la gente se construye tanto para venderse y como mostrarse como producto, es una gran novedad. La gente me lo reconoce continuamente en la calle. Creo que también pasa por descubrir cual es el creador que hay detrás del personaje que aparece en la tele. Y eso me da una enorme tranquilidad para afrontar el gran maremoto que puede llegar a ser estar en el Bailando.

- ¿Hasta la final?

- Uno puede estar una semana o 6 meses. Eso nunca se sabe. Por lo pronto, espero hacer un buen trío con mi coach y el bailarín.

- ¿Pier Fritzche (NdR: bailarín de Vanina Escudero en el Bailando 2010)?

- No está definido todavía. Sí me encantaría que esté, porque es muy buen bailarín, pero eso todavía se definirá cuando arranque Bailando.

- Por último ¿Cómo bailarín tenés la genialidad de tus obras?

- Y...tendrás que verlo. El Bailando para mí es un prueba de fuego y con el baile me defiendo (risas).