Japón cerrará y desmantelará la central nuclear de Fukushima Daiichi tras el accidente que ha afectado estas instalaciones por el terremoto y tsunami del día 11, informó ayer el portavoz del Ejecutivo nipón, Yukio Edano.

Edano aseguró en su comparecencia diaria de la tarde para informar de la crisis que "observando la situación objetivamente está claro" que las instalaciones no serán reutilizadas.

Fukushima Daiichi, en el Este de Japón y a unos 240 Km al Norte de Tokio, se cerraría una vez que se hayan controlado las fugas y las altas temperaturas que desestabilizan los peligrosos núcleos de los reactores.

Esta es la primera vez que el Gobierno habla públicamente sobre el futuro de las instalaciones, entorno a las cuales se ha establecido un perímetro de evacuación de 20 Km.

La planta sigue sufriendo problemas en la mayoría de sus seis reactores, pese a que las unidades 5 y 6 ya tienen acceso a electricidad para activar sus sistemas de refrigeración, y el reactor 2 fue conectado ayer a la corriente eléctrica a la espera de que pueda ser enfriado con sus bombas de agua.