El papa Francisco y el secretario general de la ONU, António Guterres, expresaron su consternación por la masacre en una escuela primaria en Texas, Estados Unidos, donde murieron al menos 21 personas y 15 personas resultaron heridas.

"Tengo el corazón entristecido por el tiroteo en la escuela primaria en Texas. Rezo por los niños y los adultos asesinados y por sus familias. Es tiempo de decir basta al tráfico indiscriminado de armas. ¡Comprometámonos todos para que tragedias como esta no puedan ocurrir más!", fueron las palabras del Sumo Pontífice en la Audiencia General de este miércoles 25 de mayo.

Por su parte, Guterres expresó mediante un comunicado que "es particularmente desgarrador que la mayoría de las víctimas son niños".

Asimismo, el secretario general extendió sus más sinceras condolencias a las familias y seres queridos de las víctimas y a toda la comunidad afectada por esa situación.

La reacción de los obispos en Estados Unidos

La Conferencia Episcopal de los Estados Unidos emitió un comunicado de su director de Relaciones Públicas, Chieko Noguchi, citado por el sitio Vatican News.

"Ha habido demasiados tiroteos en escuelas, demasiadas matanzas de inocentes. Nuestra fe católica nos llama a rezar por los que han muerto y a curar las heridas de los demás, y unimos nuestras oraciones a las de la comunidad de Uvalde y al arzobispo Gustavo García-Siller. Mientras lo hacemos, cada uno de nosotros también debe buscar en su alma formas de hacer más para comprender esta epidemia de maldad y violencia e implorar a nuestros funcionarios electos que nos ayuden a tomar medidas”, señala la Conferencia Episcopal.