Un hombre que estaba trabajando como camillero en los primeros auxilios a las víctimas del atentado en el show de Ariana Grande en el Manchester Arena contó, conmovido, las últimas palabras de Saffie Roussos, la niña de 8 años que es una de las 22 víctimas del ataque terrorista.

En declaraciones a la BBC, Paul Reid de Darlastan, West Midlands, describe el momento en que corrió para ayudar a la niña.

"Ella no lloró una lágrima. Hablé con ella y eso la consoló. Preguntaba por su madre y preguntando qué había pasado. Le dije que estaría bien, que no se preocupe, que íbamos a llevarla al hospital luego de que la la pusiéramos en una ambulancia", contó el hombre.

"Y yo simplemente no puedo creerlo", dijo al describir el momento en el que se enteró al día siguiente de su deceso por las heridas causadas por la bomba.