Nicolás Maduro se manifestó desde el Palacio de Miraflores luego de que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, asumiera los cargos ejecutivos del país durante un multitudinario acto en Caracas.

El dictador chavista acusó a Estados Unidos de intentar derrocarlo y anunció que decidió romper relaciones con Washington: "Anuncio que como presidente constitucional, en cumplimiento de mis funciones, he decidido romper relaciones diplomáticas con EEUU".

El régimen reaccionó así a la decisión de Washington de reconocer a Guaidó como presidente interino de Venezuela: "EEUU busca imponer un gobierno títere en Venezuela".

Maduro también apuntó contra "la oligarquía colombiana" y acusó al gobierno de Ecuador de iniciar una "persecución contra el pueblo venezolano" luego de que Lenín Moreno anunciara nuevas medidas para controlar la situación legal de los inmigrantes venezolanos a raíz del asesinato de una joven embarazada a manos de un inmigrante.

Por su parte, tras el masivo apoyo que recibió Guaidó al proclamarse presidente interino, Maduro aseguró: "Los problemas nuestros se resuelven en casa (…) El gobierno defenderá la soberanía del país con todo el esfuerzo nacional".

Sobre la juramentación del diputado opositor como presidente encargado del país, advirtió: "Ahora corresponde a la justicia actuar de acuerdo con la ley venezolana".

Esas palabras están en sintonía con la orden pronunciada este miércoles por el Tribunal Supremo chavista, que exhortó a la Fiscalía a actuar contra la directiva de la Asamblea Nacional.

La Corte oficialista se pronunció de esa manera un día después de que la Asamblea Nacional nombrara a Gustavo Tarre Briceño como "representante especial" ante la OEA.