Al menos 39 personas murieron y otras 29 resultaron heridas en un incendio en un centro de detención de migrantes en Ciudad Juárez, en el norte de México y en la frontera con Estados Unidos. Según las autoridades, fue provocado por los mismos migrantes en protesta por su deportación.

El presidente Andrés López Obrador dijo que los migrantes, muchos de ellos centroamericanos y venezolanos, prendieron fuego las colchonetas en las últimas horas del lunes por la noche (madrugada del martes en Argentina) en la puerta del lugar donde dormían en el centro de detención, una instalación del Instituto Nacional de Migración (INM).

"No imaginaron que esto iba a causar esta terrible desgracia", dijo el mandatario en su conferencia de prensa diaria, y agregó que representantes de la Fiscalía General estaban en el lugar para "iniciar las investigaciones" y "proceder legalmente".

En un comunicado, el INM dijo que el incendio comenzó en una de sus instalaciones en una zona de Ciudad Juárez, cercana a la frontera.

Cientos de personas protestaron por la tarde frente a la sede del INM en la localidad. En el centro había 68 personas mayores de edad originarias de Centroamérica y Sudamérica, dijo una nota del INM.

De los 29 heridos, había algunos cuyo estado era "grave", informó el comunicado, e inclusive algunas versiones daban 40 muertos y no 39.

El INM dijo que interpuso una denuncia ante las autoridades competentes para que se investigue el origen del incendio "y se proceda en consecuencia".

El estado de Chihuahua, donde queda Ciudad Juárez, señaló en un comunicado que el incendio ocurrió luego de que autoridades detuvieran a 71 migrantes que vagaban por las calles.

Bomberos y rescatistas colocaron varios cuerpos cubiertos con mantas color plata en la zona del estacionamiento del centro.

"Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron de que iban a ser deportados, movilizados, y, como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego", dijo Obrador.

Entre muertos y lesionados hay 28 guatemaltecos, 13 hondureños, 12 venezolanos y 12 salvadoreños.