España, 2 de diciembre.-"Se busca centrocampista derecho amateur, sub-23. Contrato temporal". El pedido parecía a medida del camerunés EnowTabot, que consiguió el empleo. Pero detrás había un oscuro truco legal y todo se complicó.

El Rayo Cantabria milita en la cuarta división ibérica. En búsqueda de figuras jóvenes para su plantel, debió recurrir a un método particular por no poder pagarle un contrato profesional al jugador que pretendía. Pero en la institución no contaban con que surgieran otros nueve aspirantes.

"Se necesita futbolista amateur sub-23, centrocampista derecho. Se ofrece contrato temporal (fin de temporada), prorrogable, horario de 16.30 a 18.30. Sueldo a convenir. Localidad del puesto: Santander. Se requiere experiencia mínima de 5 años en la profesión", publicó el club en el Portal del Sistema Nacional de Empleo de España.

Como advierte hoy el Diario Montañés, "la historia suena curiosa, pero tiene truco".

El equipo se había fijado desde hace tiempo en el centrocampista africano EnowJuvetteTabot, de 21 años, que jugaba en la primera categoría de Eslovenia y fue internacional sub-20 con Camerún.

"El Rayo le hizo una oferta y el africano aceptó. Pero como es un jugador extracomunitario, el club santanderino tenía dos vías para su contratación. Una, inviable, hacerle un contrato profesional. La otra, publicar una oferta en el Servicio Cántabro de Empleo a la que el camerunés respondiese", explicó el periódico.

Un problema nuevo surgió para "Los Delfines", pues la publicación de esa oferta llevaba aparejado un tiempo, entre 15 y 20 días, en el que más candidatos se podían interesar por el puesto. Y así sucedió.

"Por ahora ya hay diez inscritos", afirmó Diego Martín, director deportivo del Rayo Cantabria. "Y ya nos han mandado uno. Tendré que reunirme con él", añadió.

El jugador camerunés lleva casi un mes en Santander, en el norte de España, entrenando con el Rayo pero sin poder jugar. Y queda pendiente la pregunta: ¿Qué pasará con los otros candidatos, que podrían considerarse estafados?